El jefe de Gabinete, Marcos Peña, dio este miércoles su informe mensual de gestión en el Senado, donde pidió que las provincias "asuman sus responsabilidades de gasto" y señaló que el Gobierno está "en contra de que el Parlamento sea el que fije la política tarifaria" y fustigó los proyectos de la oposición para retrotraer los aumentos de las tarifas al afirmar que "la demagogia tiene un límite", frente a las preguntas que le hizo kirchnerismo, que se centraron en ese tema.
El jefe de Gabinete apeló fuertemente a la relación con los gobernadores y, tras subrayar que el Gobierno incrementó las transferencias de recursos a las provincias, trazó un paralelismo con la administración de la ex presidenta y senadora del FPV Cristina Kirchner, que no estuvo presente en la sesión informativa. Esos señalamientos se enmarcaron en el intento de la Casa Rosada para que los gobernadores reduzcan los impuestos que pesan en las facturas de los servicios públicos y morigerar así los aumentos dispuestos por la Nación.
"Avanzamos en plazos concretos hacia un nuevo federalismo a partir de un trabajo en equipo con gobernadores, rompiendo una lógica política perversa", comenzó Peña y agregó: "En diciembre de 2015 nos encontramos con un federalismo vacío de contenido, con la mayor concentración de recursos de la historia en detrimento de las provincias".
En este sentido, Peña sostuvo que los recursos "se repartían con discrecionalidad, una explícita herramienta de disciplinamiento político" y destacó que "en estos dos años y medio se aumentaron las transferencias automáticas y se dio más poder y recursos a las provincias", gracias a lo cual "han saneado sus déficit fiscales". Seguidamente, sostuvo que el Gobierno "controla cada vez menos de lo que recauda la AFIP" y afirmó que "en 2018 sólo administrará el 20%, mientras que el 47% irá a pagar jubilaciones y programas sociales" y el "33% restante irá directo a las provincias".
"Gracias a la devolución de recursos automáticos a las provincias, la parte de la coparticipación que va a las provincias en la recaudación de impuestos nacionales es la más alta en 20 años", afirmó el jefe de ministros. Además, indicó que "el Estado nacional destina (a las provincias) 10% del presupuesto en agua, vivienda y obras públicas, 20% en energía y transporte". "Los recursos genuinos de las provincias deben volver a las provincias y las provincias deben asumir sus responsabildades de gasto. En lo primero avanzamos mucho, en lo segundo todavía no tanto", agregó.
CARA A CARA CON EL SENADO
Las senadoras del FPV María de los Ángeles Sacnun, Ana María Ianni, Ana Almirón y Silvina García Larraburu apuntaron a los aumentos tarifarios y Peña señaló: "Estamos en contra de que sea el Parlamento el lugar donde se fije la política tarifaria, como así tampoco los Parlamentos provinciales".El ministro coordinador sostuvo que "para una discusión seria" sobre el tema "tiene que haber una explicación sobre de qué parte del Presupuesto se van a sacar los fondos, si no, como dijo la ex presidenta Cristina Kirchner al momento de vetar una ley en 2010, se estaría desfinanciando el Estado".
Otro de los críticos fue el formoseño José Mayans, del Bloque Justicialista, quien le señaló que para las pequeñas empresas "es imposible trabajar con las tarifas que han puesto" y cuestionó además la política de endeudamiento. Mayans manifestó su preocupación por la balanza comercial y graficó: "Dicen que hay récord en venta de automóviles, pero el 70% son importados".
Con su estilo histriónico, que hizo reír a Peña en varias oportunidades, el senador le recomendó -"en chiste" según aclaró- "echar" al equipo económico y también al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, por haber dicho que "el tema energético van a tardar 30 años en resolverlo". Finalmente, le pidió que "no tome represalias" contra la provincia de Formosa por su discurso y agregó: "Se lo digo porque ustedes después le bajan la caña allá diciendo 'tu senador dijo tal cosa'".
Peña le respondió que confiaba más en su vicejefe de Gabinete, Gustavo Lopetegui (uno de los coordinadores del área económica) que en él y le aclaró que "8 de cada 10 dólares de importación son para bienes de capital". Finalmente, y sin responder sobre el endeudamiento ni la cuestión tarifaria, remató: "No hay ninguna posibilidad de reprimendas a la provincia por diferencia de opinión. Tenemos diferencias de criterio claramente, pero creemos que el proceso económico fue ratificado en las elecciones hace muy poquito".
Por su parte, en su discurso de cierre el jefe del Bloque Justicialista, Miguel Pichetto, le reprochó a Peña que "tuvo mejores presentaciones en otras ocasiones" y sentenció: "El mensaje lo defino como insustancial". Luego, criticó la "falta de centralidad en las decisiones económicas" y, tras reconocer que el Gobierno "hizo un esfuerzo de gradualismo" y admitir que "había que salir del esquema de subsidios" a las tarifas, advirtió que "en estos últimos 60 días la política de gradualismo se ha interrumpido". "El ajuste del gas, el ajuste desmedido del agua y de la electricidad ha impactado fuertemente. Ustedes saben lo que está pasando", advirtió Pichetto.
VIDEO | Esto es todo lo que ocurrió hoy en el Senado: