El kirchnerismo fue la fuerza más votada del país con 8.424.749 votos. Sin embargo no fue la cifra más alta de las PASO, ya que el ausentismo más los votos en blanco sumaron más de 9 millones de electores que aún no decidieron que hacer el próximo 25 de octubre.
El número es alto, a tal punto que todos los candidatos adelantaron que irán en busca de esos indecisos para lograr un triunfo en primera vuelta, como se esperanza Daniel Scioli y en menor medida Mauricio Macri o llegar al balottage, como aún sueña Sergio Massa.
"Ahora más que nunca voy a buscar a los indecisos e independientes", dijo el candidato K al otro día de haber obtenido el triunfo. Quedó 8,34 puntos arriba del frente Cambiemos y a sólo 1,59 de conseguir una victoria en primera vuelta.
"El 60 por ciento del país quiere un cambio". Con esa frase, Macri, intentó demostrar que la mayor parte del electorado quiere que se termine la gestión K. El PRO deberá, además, mantener el caudal electoral de Ernesto Sanz (UCR) y Elisa Carrió (Coalición Cívica).
El objetivo de Massa será seguir con la agenda de propuestas casi diarias para conservar los votos de su adversario en las PASO, José Manuel De la Sota, y ganar casi 18 puntos más para llegar a empatar la performance del FPV.
Por zonas. El total es de ausentes e indecisos fue de 9.322.623 votos, casi 900 mil más que los que sacó Scioli. En la ciudad de Buenos Aires, el ausentismo fue del 26,52 por ciento (664 mil votos) y el de blancos 1,84% (34.120), totalizando así un bloque de casi 700 mil votos, según informó Noticias Urbanas.
En la provincia de Buenos Aires, los electores a convencer son 2.756.708, en tanto que en Córdoba, hay 852 mil votos, aproximadamente, sin dueño, contra los 632.716 que consiguió De La Sota. En Salta el ausentismo trepó hasta casi 35 puntos y el distrito con mayor nivel de votos en blanco, fue Chubut, con el 17,91 por ciento.