El proyecto para declarar "emblema nacional argentino" el pañuelo blanco de las Madres de Plaza de Mayo fue presentado por el diputado oficialista Leandro Grosso y recibió 176 votos a favor, 7 en contra y cuatro abstenciones en la Cámara de Diputados por lo que fue girado a Senadores. Desde su media sanción recibió sonantes críticas tanto desde los sectores tradicionales de la oposición como desde organismo de derechos humanos.
Las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora emitieron un comunicado expresando su posición respecto del proyecto. Desde la organización, explicaron que “el movimiento de Madres, nacido del dolor, es un movimiento de resistencia activa. Nuestra ronda en la Plaza de Mayo, con el pañuelo, simboliza nuestro compromiso inclaudicable con la Memoria, la Verdad y la Justicia. El pañuelo surgió cuando salimos a buscar a los Hijos e Hijas. Fue y es, en nuestra lucha, un lazo de unión con ellos y ellas y nos ha dado la fuerza para seguir adelante desde el principio".
“No lo sentimos emblema nacional sino signo de amor con Nuestros Hijos e Hijas, por lo tanto nos negamos a que el pañuelo sea declarado como emblema o símbolo nacional”, argumentaron.
En ese sentido, Margarita Noia, referente de Hermanos, hija de la reconocida Madre de Plaza de Mayo, “Pepa” Noia, y Secretaria de Derechos Humanos de la CTA Capital dialogó con el programa radial Ahora es Nuestra la Ciudad emitido por FM Identidad y dijo: "Avalo y respeto totalmente la posición de Madres Línea Fundadora que no aceptan que el pañuelo pase a ser un símbolo. Nadie las consultó". Según consideró Noia, el Gobierno nacional "se está adueñando de todo lo que tenga que ver con los derechos humanos pero no porque el gobierno los respete".
Sobre la media sanción del proyecto de ley de convertir al pañuelo en emblema nacional, Noia sentenció que “a las primeras que debería haberle preguntado era a las Madres". "Tienen que dejar de decidir por otros que no tienen nada que ver con la historia de las Madres, y no usarlas para aplaudir en los actos”, expresó.
Por último, resumió su postura con la actitud actual encarnada por Bonafini y su apoyo incondicional con un gobierno: “Me da bronca que la actitud de Hebe es que nuestros hijos son los 30 mil y por eso no les pongo nombre, porque yo pido por todos. Ahora bien, las Madres se llaman Hebe de Bonafini y no es así. Está la línea de Hebe y las Madres Línea Fundadora que tuvo otra historia, por algo… Tenemos la obligación de devolverles la identidad, no coincido con Hebe cuando ella no reconoce la identidad de los desaparecidos”.