POLITICA

Massa provocó el enojo del Peronismo Federal y peligra el acuerdo político

Adolfo Rodríguez Saá mostró signos de hartazgo con el hombre del Frente Renovador. El rol del cordobés De la Sota.

El prefecto Alcides Díaz Gorgonio, autor del robo a la casa de Sergio Massa.
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El armado del Frente Renovador en conjunto con el Peronismo Federal puede quedar trunco si no rearman las negocaciones entre Sergio Massa, Adolfo Rodríguez Saá y José Manuel de la Sota.

El puntano está molesto con el hombre de Tigre por el constante ninguneo y la colocación de intermediarios que lejos están de ser del gusto suyo. En su reciente lanzamiento de candidatura presidencial se permitió hablar de una primaria con De la Sota y lo excluyó a Massa, según informó La Política Online.

Hace unos días, Massa participó de un encuentro con un centenar de dirigentes en el gremio de petroleros de Neuquén y reiteró su predisposición a participar de una primaria con ambos, aunque respetando la marca Frente Renovador.

La definición del acuerdo quedó en manos de una comisión con dos representantes por cada sector. Pero, según informó el portal, Massa eligió a Graciela Camaño y a Mario Das Neves y agregó a otra figura: César “Chiche” Aráoz, un dirigente con historia en el menemismo y el duhaldismo. 

Ninguneo. Massa llegó dos horas tarde a una de las primeras reuniones de los tres candidatos, algo que irritó a sus pares. Luego, con el paso del tiempo, el diálogo se enfrió y en el Congreso sus bloques no tienen la mejor relación. Aún no se dio la foto del trío. 

El último cortocircuito se da con respecto a la votación en el Congreso por el pliego de Roberto Carlés como juez de la Corte Suprema de Justicia, donde no puede llegar sin los votos de los senadores del Peronismo Federal y es sabido que Masssa lanzó una fuerte campaña en contra de su postulación.

Si bien hasta ahora se comprometieron a rechazarlo, les llegó la presión del Gobierno y de la Iglesia, que apoya a Carlés por su cercanía con el Papa Francisco. Puede ser el capítulo final de una negociación cada vez más complicada.