POLITICA
El fin de una relacion personal

Mujica había criticado a Cristina antes del desliz

Desde 2012, medios orientales reproducen las quejas de Pepe hacia la administración K. Cuestiona la falta de equidad en el comercio bilateral y sugiere que mantiene una buena relación con Cristina sólo por conveniencia.

Otros tiempos. En 2011 el presidente de Uruguay visitó la Argentina. Las diferencias se profundizaron.
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En realidad, José “Pepe” Mujica no tuvo un desliz esta semana cuando llamó “tuerto” a Néstor Kirchner y “terca” a Cristina Fernández, sin saber que lo estaban filmando. En dos entrevistas que dio a medios uruguayos en octubre de 2012 y marzo de este año, ya se había referido a los Kirchner en esos términos. Además, había criticado la política comercial con la Argentina.

La polémica se desató el jueves pasado, cuando se difundió un video en el que el uruguayo decía –en una conferencia de prensa, en la que creía que tenía los micrófonos apagados– que su par argentina era “una vieja terca” y se refería a Néstor Kirchner como el “tuerto”. Fuentes del Gobierno nacional consideraron, en diálogo con PERFIL, que las palabras pronunciadas quebraron, para siempre, la relación personal que tenían los dos presidentes, pero opinaron que no habrá consecuencias en la relación bilateral.
Pero lo del jueves no fue un exabrupto. En marzo de este año, le dijo a la revista Lento que Cristina era una terca porque “desde hace siete años vienen diciendo que la Argentina explota y no explota. Es terca”. En ese mismo reportaje agregó que Tabaré Vázquez –el antecesor de Mujica– no tuvo problemas con nuestro país, sino “con el tuerto Kirchner, que era bastante baboso. Que Dios lo tenga en la gloria”, polemizó.

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Mujica también explicó que le interesa mucho arreglar la relación con Brasil para incidir en una mejora en el vínculo bilateral con la Argentina. Se quejó también del déficit en la balanza comercial oriental al compararlo con el nuestro. Es decir, se preocupaba porque la Argentina le vende mucho más a Uruguay de lo que compra.

En octubre del año pasado, repartió elogios y críticas para la Argentina. Dijo, en la misma entrevista, que no se puede catalogar de “facho ni nada por el estilo” al Gobierno argentino, “a veces creo que nos pasamos (en alusión a las descalificaciones orientales hacia este país)”.

Al comparar la Ley de Medios de ambos países, Mujica advirtió que “acá no hay ningún medio que le corresponda al gobierno. Allá –por la Argentina–, sí, construyeron poder y tienen aparato. Acá no va a haber polarización porque todos los medios están en contra del gobierno. Se van a pelear entre ellos”.

Describió su relación con Cristina como áspera. “Cuando tengo que discutir, soy muy duro. La reunión acá en el Parque Hotel (se refiere a la cumbre de presidentes del Mercosur) fue dramática. El último regalito que le hice a Cristina fue el libro de Pablo Blanco Acevedo (El gobierno colonial en Uruguay y los orígenes de la nacionalidad), que habla de la lucha de puertos, como para decirle: ‘mirá que esto que pasa es la historia de Montevideo’. Pero tengo que mantener la puerta abierta a una actitud constructiva y de diálogo, porque consigo más”, aseguró a la revista.

Y critica la política comercial: “Desde luego que las políticas que está llevando Argentina adelante son enormemente proteccionistas y nos crean problemas por acá y por allá. Ahora, ¿qué hacemos? ¿Rompemos relaciones, declaramos la guerra?”, dispara.

Una fuente diplomática le dijo a PERFIL que, con sus dichos, Mujica hirió a la Presidenta. Ocurre que, para ese funcionario, el término “vieja” le dolió más que el de “terca”. “Con terca, se puede estar refiriendo a las negociaciones comerciales, entra dentro de los parámetros normales, pero decirle vieja es una barbaridad”, indicó.

En la Argentina, las declaraciones del presidente uruguayo generaron estupor y sorpresa, porque hasta ese momento la relación entre los dos mandatarios era muy buena. Hace un mes, cuando murió el venezolano Hugo Chávez, Mujica le pidió a Cristina viajar en el avión presidencial. En el verano, le permitió a la AFIP investigar los bienes de los argentinos en el exterior, una medida que le costó críticas de la oposición. Por eso, nadie entiende por qué se despachó así Mujica, aunque, con los hechos consumados, dicen que, evidentemente, es lo que verdaderamente piensa sobre Cristina y Néstor.