El expresidente Eduardo Duhalde advirtió que en la Argentina "estamos chapoteando en una cloaca" y afirmó que el presidente Mauricio Macri lidera "un gobierno de amigos de la infancia". "Gobernar es priorizar y el gobierno no lo hizo. Es un gobierno de amigos de la infancia", afirmó el dirigente peronista en el programa "La Vuelta completa" por Somos Radio.
El líder peronista, que planea lanzar su candidatura presidencial para 2019, sostuvo que "estamos llegando a la mega barbarie" y precisó que "lo más importante de un país es desarrollar la productividad y cuando hay políticas usureras los países caen en lo que estamos viviendo. Así la cosa no va a andar", apuntó. Y agregó: "Este gobierno está llevando adelante políticas usureras, el que tiene dinero no le conviene trabajar. Es muy parecido a lo que pasaba en (la crisis de diciembre del) 2001", indicó.
El gobierno afronta una severa crisis cambiaria, con un dólar que roza los 29 pesos, cuando la cotización estaba en 13,90 al asumir en diciembre del 2015. El alza del dólar provocó una estampida de precios y economistas estiman que el índice llegará a 27-30 por ciento este año, contra la proyección oficial de 17% en el presupuesto de 2017, en medio de fuertes aumentos de tarifas en servicios básicos. Un mes atrás, Duhalde había hablado de las negociaciones del Gobierno con el FMI, afirmando que "estamos condenados al éxito".
Para Duhalde, "hay una borrachera de poder que creen que pueden aplicar las políticas solos y así no se puede gobernar. No se puede sin mayoría parlamentaria". "Estamos chapoteando en una cloaca. En momentos críticos todo el esfuerzo y la energía hay que ponerlos en temas centrales, no hay que dividir a la sociedad", sostuvo.
"Para mí, el que gana gobierna y la oposición también, porque debe controlar y hay que trabajar juntos", dijo a continuación en diálogo con radio La Red. Tras afirmar que "nunca" habló "mal de nadie", en alusión a sus críticas al presidente, Duhalde adujo que sus cuestionamientos los formula en el plano político y destacó que si el presidente le "toca el timbre" y lo consulta "le diría que quiero cambiarle las ideas a las que está aferrado". "Le diría que quiero verlo, darle una opinión diferente", señaló, aunque reconoció que Macri "tiene todo el derecho de hacer lo que quiera".
