Una gran victoria para el Grupo Macri. Una durísima derrota para el Estado argentino. Si tuvierámos que poner en términos futboleros lo que sucede con la deuda que el Correo Argentino tiene con el país, habría que decir que Franco Macri estuvo a minutos de obtener un rotundo triunfo. Pero el dictamen de la fiscal general en lo Comercial, Gabriela Boquín alertó a todos. Y ahora entró en suspenso.
Perfil consultó a especialistas en la materia que explicaron paso a paso, cómo fue la maniobra del Grupo Macri en las negociaciones para pagar sus deudas con el Estado. Brevemente es necesario repasar la historia. Durante la década del '90 Carlos Menem privatizó el Correo y se lo adjudicaron los Macri. Durante años no pagaron el canon establecido con la excusa de que el Estado no les permitía aumentar las tarifas. En 2001 entró en un concurso preventivo. En paralelo, hicieron juicios al Estado. Al momento de entrar en este concurso, debían 300 millones de pesos (por la convertibilidad, eran 300 millones de dólares).
El Grupo ofreció al Estado pagar el 100 por ciento de la deuda. Pero a valor nominal. Es decir, pagar 300 millones de pesos, sin contar la inflación ni la devaluación en el país. Además de una serie de intereses al 7% anual sobre saldos al año de pagado la última cuota. En criollo, esto en el mercado se observa como una estrategia para, en realidad, ir bajando la tasa de interés.
La fiscal consideró "abusiva" la oferta. ¿Lo fue? Hay que detenerse en la ley del Concurso de Quiebras. Hasta 1995 estuvo vigente la ley 19951 que establecía que para no ser abusiva debía ser de mínimo el 40% del valor de los créditos. En 1995 la ley se modifica y surge la norma 24.522, que eliminó los límites y le dio facultades al juez para determinar si ayudar o no, mediante justificaciones coherentes, a las empresas que busque entrar en un concurso preventivo. ¿Qué justificación tenía el Correo Argentino para pagar de esta manera? No muchas, según explicaron a este medio.
La oferta. La fiscal observó con detenimiento lo que propuso el Grupo Macri en la audiencia del 28 de junio del 2016 y que fue aceptada. Se trata de una serie de cuotas para pagar a partir del primer año después de homologado el acuerdo. Siempre, a valor nominal. Las primeras cuatro cuotas con el 1% de la deuda. Siempre una cuota por año. Allí, ya es el 4% del total. Del 5to al 9no pago al 2% cada una (total de 14%). La cuota 10 y 11 del 3% del total (20%). Las cuotas 12 y 13 del 15% cada una (50%). Luego, la cuota 14 con un 20% y la número 15 de un 30% para llegar así al 100% en 2033. Es decir, pagarían 300 millones de pesos en 2033.
Dictamen. Con estas pruebas, ¿qué dijo la fiscal? Que, como mínimo, habría que actualizar el monto de la deuda, por ejemplo a una tasa activa del Banco Nación o la cotización del dólar, lo que daría ya no 300 millones sino una cifra cercana a los 4700 millones. ¿A qué conclusión llega? Señala que a todas luces no hubo un sacrificio equivalente de la empresa y de los acreedores para honrar sus deudas.
¿Hay solución? Ante el dictamen de Boquín, quien debe decidir es la Sala B de la Cámara Comercial. El Grupo puede optar por una tercera vía, es decir, mejorar la propuesta, que podría ser ofrecer una deuda actualizada por un índice de precios o alguna tasa de interés o alguna cláusula atada al dólar. "Si se paga un 7% de interés como dicen, pero en dólares, eso sería razonable", explicaron a este medio.
Juega la Cámara. Ahora es turno de los jueces. Y hay una nueva encrucijada. Si aceptan la propuesta del Grupo, la fiscal ya adelantó en su dictamen que irá a la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Si no la aceptan, entonces se confirma la sentencia de 1° instancia del 18 de marzo de 2010 que consideró no aceptar la propuesta de los Macri y se debería aplicar el procedimiento del artículo 48 de la ley 24522, llamado "Cram Down". ¿Qué significa esto? Se pueden presentar terceros y hacer una nueva propuesta a los acreedores y quedarse con Correo Argentino. A simple vista parece un pésimo negocio, ya que la empresa no está operativa, pero aún conserva numerosos juicios con el Estado.
En caso de que la cifra a demandar fuera millonaria (que seguramente lo sea) "es un gran negocio financiero, de papeles", añadieron las fuentes especializadas a Perfil. La gran pregunta entonces es ¿cuánto le reclama al Estado el Grupo Macri?
Por último, puede pasar que nadie se presente. En ese caso se decretaría la quiebra. Si esto sucediera, es necesario saber las responsabilidades del Grupo asumidas según los términos de la privatización de los '90 y eventualmente de las acciones de recomposición patrimonial que puedan promover los síndicos actuantes. En pocas palabras, saber quien asumió la responsabilidad cuando se privatizó.