El sábado por la noche Patricia Bullrich dejó de lado, por un rato, su campaña presidencial. Decidió relajarse unas horas cuando fue al cumpleaños de la diputada Sabrina Ajmechet, quien invitó a unas 70 personas. En el evento confluyeron desde la escritora Pola Oloixarac (su amiga personal) hasta por diputados de Juntos por el Cambio como el “lilito” Maximiliano Ferraro. También dos de las piezas clave del armado bullrichista: Hernán Lombardi y Damián Arabia.
Entre comida judía de todo tipo, tras el canto de feliz cumpleaños, apareció el “Patricia presidente”. A pesar del frío, el departamento estaba lleno y hasta varios dirigentes ocuparon el balcón. En esas horas Bullrich ya tenía definido que, ese mismo lunes, le ofrecería formalmente a Carlos Melconian, quien viene divulgando sus ideas bajo el sello de la Fundación Mediterránea, hacerse cargo del área económica si es que le toca llegar a la Casa Rosada.
Bullrich ya venía escuchando de boca de varios integrantes de su mesa política que era imperioso, ante la discusión económica que se trazaba con Javier Milei y a la cabeza y, justamente, el ministro del área y candidato kirchnerista, Sergio Massa, disputar en la arena pública ese debate.
En este contexto, la idea de ya jugar a Melconian a 50 días de las elecciones resultó clave. Y el lunes pasado se selló en un encuentro a solas entre ambos en la casa de la candidata en Palermo durante dos horas.
Hubo dirigentes bullrichistas que aconsejaron, y será un tema de discusión en los próximos días, que vaya mencionando a su gabinete. Es más: argumentan que, a falta de figuras en el espacio de Milei, deben ser dirigentes reconocidos, que no haya que “googlearlos” para saber quiénes son. Se menciona a Ricardo López Murphy y al gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, titular de la UCR y quien fuera candidato a vice de Horacio Rodríguez Larreta, entre otros.
En la reunión a solas entre Melconian y Bullrich, además de las bromas entre Racing e Independiente – el economista es fanático de la Academia y la exministra de Seguridad es socia del “Rojo”, pasión que comparte con Néstor Grindetti– se habló mucho de ir dosificando las propuestas y, sobre todo, marcar las diferencias con La Libertad Avanza y, por supuesto, con el oficialismo.
Incluso, Bullrich hizo hincapié en un “scrum” de economistas: que los colaboradores de la Fundación Mediterránea, unos 80, se sumen a los más de 20 que comenzaron a trabajar coordinados por Luciano Laspina, diputado de Jxc y referente bullrichista.
Con todo, este jueves 31 de agosto a las 10.30 se los verá juntos, por primera vez en campaña, a Bullrich y a Melconian en la capital de Córdoba. La excusa: el ciclo “Voces Federales” en el Hotel Quinto Centenario organizado por la Fundación Mediterránea.
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Allí, además de la presentación formal, se verá un escenario con un grupo nutrido de los economistas de JxC y los que trabajan en la fundación.
Aunque no será el momento de las propuestas concretas aún, la incorporación formal le permitirá a Bullrich no ser el eje de los proyectos económicos y dejarlo en manos de un especialista, quien además ha hecho de la comunicación una forma de generar consensos.
Con todo, algunos aspectos que ya trascendieron del plan Melconian hablan de una “economía bimonetaria”, no de dolarización, acaso como forma de discutir con Milei.
También se menciona un paquete de leyes y reformas desde el 10 de diciembre relacionadas con distintos aspectos, desde la autonomía del Banco Central pasando por la reforma previsional.
A eso se le agrega un digesto de leyes a derogar, una serie de iniciativas en las que están trabajando Ajmechet y la candidata a diputada por CABA y economista Daiana Fernández Molero.
El déficit cero en el primer Presupuesto está como un eje central. En las mejores formas para llegar a ese objetivo viene dialogando con su equipo integrado por Rodolfo Santángelo, Daniel Artana, Jorge Vasconcelos y Enrique Szewach (quien fue funcionario de Cambiemos).
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En este punto ya se habla de las grandes empresas públicas deficitarias como uno de los principales motivos, además de una hipotética reducción de cargos del orden del 25%.
En cuanto a la relación con las provincias, Melconian tiene en mente un pacto similar al que impulsó Mauricio Macri junto a Rogelio Frigerio en 2017: un plan progresivo para reducir la carga fiscal provincial, en especial en materia de Ingresos Brutos.
En materia de reforma laboral, si no hay consenso para una ley, se analiza trabajar sobre los convenios colectivos de trabajo, uno por uno, para su modernización.
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