Santiago Cúneo se lanzó como candidato y propone seguir el modelo de Bukele en Argentina
El conductor será precandidato a presidente por el Partido Laborista junto al piquetero Raúl Castells. Se definió como admirador del presidente de El Salvador, cuestionado por organismos de Derechos Humanos.
Santiago Cúneo será precandidato a presidente en las PASO. |
Cedoc
El conductor Santiago Cúneo oficializó su precandidatura a la Presidencia de la Nación y en los últimos días se vieron en las calles los afiches de su propuesta, con la que busca seguir el modelo de gobierno de Nayib Bukele, el presidente de El Salvador.
En los afiches de campaña se lo ve a Cúneo del lado derecho con el mensaje “CUNEO presidente” y, del lado izquierdo, a Bukele. En la parte superior se lee “El Salvador”, y en la parte inferior “Argentina”, como una suerte de alianza entre ambos países. En el cartel también están las Islas Malvinas.
Cúneo lanzó su precandidatura presidencial con el sello del Partido Laborista, dijo que se presentará en las PASO con Raúl Castells y se definió como admirador del presidente más joven de la historia de El Salvador, aunque aclaró que no lo conoce personalmente ni mantuvieron contacto.
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Los afiches que se ven en la vía pública. Santiago Cuneo quiere copiar el modelo de Nayib Bukele (El Salvador) en Argentina.
Santiago Cúneo.
Conocido por su política de “mano dura” contra la inseguridad, Bukele dispuso una serie de medidas, entre las que se encuentran la baja de imputabilidad a los 12 años y la prisión preventiva indefinida, que fueron criticadas por organismos de derechos humanos.
“La república agotó su camino en estos niveles de decadencia que nos toca vivir y la presencia de algunos personajes muestran que lo viene es, simplemente, la bajada de una cortina y la llegada de un modelo de El Salvador”, aseguró el precandidato en diálogo con Infobae.
Cúneo sostuvo además que “la Argentina está terminada” y también pronosticó que este proceso electoral “va a ser el último proceso electoral en paz en la Argentina”.
Respecto del modelo de gobierno de El Salvador, sostuvo que se trata de “un país muchísimo más complejo que el nuestro en materia de inseguridad y de delito complejo que resolvió su conflicto con una persona que, simplemente y desde lo más básico, llegó al poder en El Salvador para hacer lo dijo que iba a hacer" y que es "un ejemplo para toda América”.
No es la primera vez que Santiago Cúneo se postula para un cargo ejecutivo. En 2019 quiso competir por la gobernación bonaerense pero por falta de votos no llegó a disputar las elecciones generales. Dos años después también quiso ser diputado nacional, pero los sufragios en las urnas le jugaron nuevamente una mala pasada.
Nayib Armando Bukele Ortez nació el 24 de julio de 1981 en la ciudad capitalina de San Salvador, y es descendiente de inmigrantes palestinos.
Su padre, Armando Bukele -fallecido en 2015-, fue un empresario con negocios bien diversos vinculado al poder y al Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), el partido izquierdista surgido a partir de la guerrilla que peleó en la guerra civil de El Salvador (1980-1992).
Llegó a la presidencia el 1 de junio de 2019 luego de obtener el 53% de los votos en un país marcado por la debilidad de las instituciones y el crimen organizado y representó un cambio de paradigma en la forma de gobernar el país con una de las tasas de homicidios más altas en el mundo.
Nayib Bukele.
Anunció una serie de medidas consideradas por analistas como "de mano dura" para combatir en lo que denominó "la guerra contra las pandillas", y dispuso una estrategia de seguridad que permitió reducir la tasa de homicidios en el país sustancialmente, lo que le valió una creciente popularidad y una aplastante mayoría parlamentaria. En tanto, el plan fue cuestionado por presuntas negociaciones entre funcionarios del gobierno de Bukele con las tres principales pandillas en El Salvador, algo que el presidente niega.
Las medidas implementadas para combatir las estructuras de las pandillas, entre ellas los regímenes de emergencia decretados al interior de los centros penales, limitación de comunicaciones y la política de cero tolerancia contra el crimen, han generado críticas de organismos de derechos humanos.
Organizaciones nacionales e internacionales han condenado el régimen por supuestas violaciones masivas del debido proceso, hacinamiento extremo en las cárceles y muerte de personas bajo custodia de las autoridades.
