Sindicalistas kirchneristas piden que vuelva el impuesto a la riqueza
Los gremialistas más cercanos a Cristina Kirchner reclamaron un nuevo tributo para pagar la deuda con el FMI. La propuesta no tiene el aval de "los gordos" de la CGT.
Un grupo de sindicalistas identificados con Cristina Kirchner, como Sergio Palazzo, Hugo Yasky y Pablo Moyano, pidió un impuesto a la riqueza para cancelar la deuda que mantiene la Argentina con el Fondo Monetario Internacional. Una propuesta en línea con la que emitió el bloque de senadores que responde a la vicepresidenta.
Los gremialistas, entre los que se encuentran aquellos que pertenecen a la CGT que responden a Moyano como también a las dos CTA, dieron a conocer su posición a través de un comunicado que titularon “Paz, pan y trabajo: que la deuda no la paguen los de abajo”, que incluye críticas al entendimiento que alcanzó el Gobierno nacional con el organismo internacional de crédito.
A su vez, expusieron que “deben ser los sectores más pudientes de nuestra sociedad” quienes paguen la deuda y para ello proponen “que la Ley 27.605/21 se prorrogue y sea un aporte solidario extensivo de las grandes fortunas mientras dure el endeudamiento con el FMI”.
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“Que paguen los cien agentes que sabemos que fugaron 24.679 millones de dólares y que los organismos de control fijen la mirada e investiguen a quienes tienen activos no declarados en el exterior y que paguen los que tienen que pagar”, determinaron. A lo largo del texto, hay una promesa, en línea con lo que manifiesta Pablo Moyano en cada oportunidad: no puede existir “un ajuste” para la clase trabajadora. Si eso sucede, habrá convocatoria en “las calles, a lo largo y a lo ancho de nuestra Patria reclamando por lo que se comprometieron: salarios y jubilaciones por encima de la inflación, ningún tipo de reforma laboral ni previsional, las tarifas de los servicios públicas deben ser razonablemente accesibles para el trabajador”.
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Por último, los firmantes hicieron mención a la agenda de la coalición oficial: “El gobierno del Frente de Todos, nuestro gobierno, llegó para poner fin a las injusticias, para poner en marcha el aparato productivo, para dar trabajo y para construir un Estado de bienestar donde podamos vivir dignamente”.
La proclama no lleva la firma de los gremios de servicio de la central Azopardo, los denominados “gordos”. Lo que desnuda las diferencias internas que existen entre aquellos alineados a la posición deAlberto Fernández y otros que apoyan al FdT pero muestran críticas cuando lo consideran necesario.
Impuestos a la riqueza
Una propuesta que impulsó el oficialismo a modo de emergencia, por única vez, que alcanzó a las personas y sucesiones que excedían los 200.000.000 pesos en bienes, fue el llamado impuesto a la riqueza, sancionado en 2021. Recaudó casi 197 mil millones de pesos según datos oficiales.
El aporte será del 20% sobre los bienes no declarados, que deberá ser abonado en dólares y “en el caso de declarar los bienes pasados los seis meses de la entrada en vigencia de la ley, la alícuota subirá al 35%”.
