El presidente Mauricio Macri descansó durante el fin de semana junto a su familia en el complejo presidencial de Chapadmalal y ya regresó a la Ciudad de Buenos Aires. El jefe de Estado, que en la previa había reclamado sin éxito que ambos partidos se jugaran con visitantes, aún no hizo declaraciones sobre la cancelación de la vuelta de la superfinal entre Boca Juniors y River Plate por la Copa Libertadores, que este domingo volvió a quedar suspendida hasta nuevo aviso.
El mandatario fue trasladado desde Chapadmalal hacia Mar del Plata en helicóptero en compañía de la primera dama, Juliana Awada y la hija de ambos, Antonia. Juntos partieron a las 17:30 del domingo en el Tango 04, con destino a la capital.
En ese complejo turístico el Presidente se refugió en varias oportunidades en lo que va del año. Fue allí donde, en febrero, donde se realizó la reunión con miembros del gabinete nacional ampliado en el marco del ya tradicional “retiro de trabajo”. Sin embargo, en esta oportunidad Macri no cumplió con una agenda oficial ni tuvo reuniones de trabajo, dado que el viaje estaba previsto exclusivamente para que pudiera descansar.
La visita a la residencia provincial en territorio bonaerense ocurrió una semana después del incidente que la familia presidencial vivió en la quinta que Macri posee en Los Abrojos, en el partido de Malvinas Argentinas. Hace siete días, cuatro personas intentaron ingresar al lugar entre insultos y amenazas al líder de Cambiemos y su familia, tras lo cual fueron detenidos.
En medio del debate por las tarifas, Macri se toma el fin de semana largo en Chapadmalal
El descanso de Macri tuvo como trasfondo los incidentes desatados el sábado en el barrio porteño de Núñez, cuando un grupo de hinchas de River apedrearon y lanzaron gas pimienta sobre el micro que trasladaba al plantel de Boca, por lo cual resultaron heridos varios jugadores. El insólito trayecto del vehículo xeneize por el cruce entre las avenidas Monroe y Libertador, justo en una zona de alta concentración de hinchas millonarios, desnudó las falencias del operativo de seguridad, que fue compartido por fuerzas nacionales y porteñas.
Si bien el jefe de Estado no dio declaraciones sobre lo ocurrido el día sábado, brindó su respaldó al jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, según publicó el diario La Nación, luego de que el intendente saliera a dar explicaciones sobre lo ocurrido.
El jefe de Gobierno de la Ciudad encabezó este domingo una conferencia de prensa donde relacionó el ataque al micro del xeneize con la barra brava de River. “Lo de ayer tiene que ver con eso (referido a los allanamientos en la previa al Superclásico) porque nadie lo puede negar. Se encontraron entradas en manos de la barra de River y son 300 personas que tenían entradas y no pudieron entrar”, aseguró el funcionario porteño.
A.G./F.F.