De a poco van cediendo las restricciones a la movilidad y a diversas actividades. En este contexto, RePerfilAr repasa cómo se vivió el primer fin de semana largo en la Ciudad de Buenos Aires luego del fin del aislamiento social, preventivo y obligatorio.
En uno de los días más calurosos que tuvo el año, la gente se movilizó por la capital y optó por pasar el día al aire libre en familia. Los precios aumentaron considerablemente desde marzo pero, pese a eso, las personas optaron por tomar una cerveza en los nuevos bares que abrieron en San Telmo, respetando la distancia social y siguiendo todos los protocolos sanitarios.
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Con música, mucha gente en las plazas y las ferias llenas de artesanos, la nueva normalidad tiene mucho de la antigua normalidad. Se espera que en los próximos días empiecen a llegar los primeros turistas a la Ciudad, cuando se active el protocolo para turismo internacional a partir del 8 de diciembre, fecha que esperan con ansias los comerciantes de la zona.
Por su parte y a pesar de los diversos protocolos, varios turistas optaron por pasar el fin de semana largo en la costa atlántica o en Córdoba, dejando la pandemia momentáneamente en el olvido.
