Luego de la polémica filtración de una foto en la que se ve al presidente Alberto Fernández festejando el cumpleaños de su pareja Fabiola Yáñez junto a otras 9 personas en plena fase 1 de la cuarentena, el primer mandatario salió a pedir perdón por lo ocurrido y aseguró que no volverá a suceder.
La filtración fue un golpe duro en el Gobierno. Tal es así que dejó paralizado a todos los miembros del ejecutivo durante al menos 12 horas. En ese periodo de tiempo se intentó hacer un control de daños, admitir el error e intentar salir adelante con el menor impacto posible.
Hacia adentro se proyectó mucha bronca porque están atónitos por lo que pasó y no hay un fusible para eyectar como fue el caso del vacunatorio VIP. “¿Qué va a hacer el marido, llegar a casa y cagarla a palos?”, dijo Aníbal Fernández sobre el escándalo. “Es evidente que hubo un descuido, que se cometió un error, que no debería haber pasado y que estuvo mal”, disparó el jefe de Gabinete Santiago Cafiero.
“La primera dama tiene un equipo que le sirve para el trabajo que ella hace y les pido por favor que seamos muy cuidadosos respecto del rol de las mujeres en esto porque realmente es un trabajo muy difícil”, dijo Cecilia Todesca. “Son marcadas las diferencias que tengo con el presidente porque no son solo de fondo sino también de forma”, concluyó Sergio Berni, ministro de Seguridad bonaerense.
