En la reunión de gobernadores en la Casa Rosada, todos apuntaron contra el gran ausente, Horacio Rodríguez Larreta. Los gobernadores ven mal la decisión del jefe de gobierno porteño que busca gravar a las Leliqs para intentar aliviar las arcas porteñas luego del recorte de la coparticipación, conflicto que la Ciudad espera poder resolver en la justicia.
Wado de Pedro, ministro de Interior se refirió al jefe de gobierno: “Sería muy bueno poder contar con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, ellos tienen las puertas abiertas para poder firmar el consenso hasta fin de año”. Por ahora, está cortado el diálogo entre Nación y Ciudad en casi todos los ámbitos, solamente dejan de lado las diferencias con temas relacionados a la pandemia.
Pobreza: el gran desafío de la Argentina
Luego de la reunión el presidente invitó a todos los gobernadores a comer un asado en la quinta de Olivos. En la sobremesa, se empezó a tratar el fin de las PASO, lo cual tomará más fuerza en las próximas horas. El presidente busca el consenso general dado que requeriría modificar la Ley Electoral vigente.
Se habló mucho también sobre la ratificación de la condena de Amado Boudou en la Corte Suprema. El gobierno salió a criticar al máximo tribunal a través del jefe de gabinete. Parrilli, por su parte, pidió que se acelere la reforma judicial y todo parece indicar que se votará en diputados en las próximas semanas. De Pedro también se expresó al respecto y apuntó contra la Corte: “Hay un sector del poder judicial que usa el código procesal para hacer política, tienen que dejar de presionar”.
