Paradigmáticamente, un empleado de seguridad de una garita en la zona de Haedo fue detenido por marcar casas para que sean robadas. Pero, cuál era su metodología, utilizaba un trozo de papel blanco con el que marcaba las casas vacías a las que delincuentes podían entrar a robar.
El detenido fue identificado por la policía como Víctor Osvaldo Anriquez, quien estaba contratado por los propios vecinos del barrio de Haedo sur para brindar seguridad en la zona.
El hecho fue descubierto por los vecinos del barrio, a raíz de una sucesión de hechos delictivos, quedando el acusado registrado en las cámaras de seguridad de la zona con una actitud sospechosa.
El arresto de Anriquez ocurrió tras un llamado el 911, cuando personal del Grupo Táctico de Operaciones de Morón se hizo presente en una casa ubicada sobre la calle Alegría al 200, de Haedo, alertado por un robo.
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Los agentes policiales que participaron del operativo pudieron cotejar al llegar que se había tratado de una tentativa de robo y que los ladrones se habían escapado. No obstante, en el domicilio encontraron un papel blanco de similares características a los que habían sido hallados en otras casa robadas del barrio.
Asimismo, ese papel coincidía con otros que se vio dejar al sospechoso en distintas casas, lo que quedó registrado por las cámaras de seguridad.
Investiga el caso la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 de Morón, que dispuso el secuestro de dos teléfonos celulares del acusado, uno particular y otro que usaría con las personas que trabaja.