Esta semana legisladores oficialistas aprobaron una medida que impide que los jueces usen los estándares judiciales de razonabilidad para analizar las decisiones gubernamentales, integrado por partidos ultraortodoxos y ultraderechistas.
Para los críticos es un ataque al equilibrio de poderes. Irán y Hezbollah, creen que Israel está en un punto histórico de debilidad que va en camino a la desaparición.
Los sondeos muestran que los israelíes tienen una opinión negativa del 62 por ciento sobre el trabajo del Gobierno de Netanyahu .Y entre los seguidores del partido centro derecha Likud del primer ministro las opiniones negativas superan a las positivas 41 a 33.
En tanto, el Colegio de Abogados de Israel, junto con otros grupos, presentó solicitudes ante la Corte Suprema para anular una nueva legislación.
La prensa local tituló con la frase "Un día negro para la democracia israelí" en varias portadas, y algunas de ellas incluso publicaron sus tapas pintadas de negro en señal de protesta.
Después de la votación en la Knéset (Parlamento), los manifestantes se mantuvieron en las calles hasta altas horas de la noche, según informó la agencia de noticias AFP.
En la ciudad de Tel Aviv, la multitud ondeaba banderas israelíes mientras la policía utilizaba carros hidrantes para dispersar una manifestación en una de las principales rutas de la ciudad.
La Policía reportó que unas 58 personas fueron detenidas durante las manifestaciones, con foco en Tel Aviv, que fue escenario de uno de los mayores movimientos de protesta en la historia del país.
