Tras varios años de idas y venidas, la Cámara de Apelaciones validó el convenio urbanístico entre el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y la empresa Inversiones y Representaciones SA, más conocida como IRSA.
Así, la compañía quedó habilitada para llevar a cabo su proyecto para sumar viviendas, oficinas, comercios, escuelas, sanatorio y un parque público a la Costanera Sur.
Según lo acordado, el Gobierno modificó la normativa para habilitar la construcción de edificios frente al Río de la Plata a cambio de que la firma mencionada entregue al dominio público 48 de las 71 hectáreas para la realización de un espacio verde público.
El emprendimiento de IRSA contempla una inversión total de 1.800 millones de dólares en un plazo de entre 15 y 20 años. El plan incluye la construcción de 6.000 viviendas que se emplazarían en un terreno de 71.161 hectáreas y se podrían construir en aproximadamente 895.000 metros cuadrados.
Por otro lado, la empresa se encargará de las obras de infraestructura y vialidad en el predio y creará el espacio público solicitado aportando hasta un total de 40 millones de dólares junto con el mantenimiento cedido por 10 años o hasta completar la suma de 10 millones de dólares.