La preocupación por la grave crisis económica nacional alcanza a todos los rubros. Sin embargo, hay un sector que suma una alerta: los administradores y la morosidad en el pago de las expensas. Los consorcios observan esta problemática, tanto de parte de los inquilinos como de los propietarios.
“Hay una morosidad estructural. A los administradores les preocupa mucho este tema desde 2020 y lo que hicieron fue ponerlo en foco”, explica el director ejecutivo de Consorcio Abierto, Albano Laiuppa.
Según el informe, la morosidad en las expensas alcanza el 36,3% de la preocupación de los administradores. Luego le sigue la imposibilidad de reunión, con el 30,8%. El mantenimiento de la estructura del edificio, en tanto, se ubica en el 12,1%, al tiempo que el incumplimiento de los protocolos contra el coronavirus cierra con el 9,9%.
“Después de la tercera expensa adeudada se activan los mecanismos legales. Es una obligación del administrador ya que es el que administra el consorcio y, si hay una unidad funcional que no paga, las otras unidades funcionales van a subsidiarla”, analiza Laiuppa.