Israel reanudó sus bombardeos en Gaza tras el fin de la tregua de una semana con Hamás. Hubo más de 100 muertos y un sinnúmero de heridos llegaba a los hospitales. Con las primeras explosiones, miles de gazatíes buscaron refugio en hospitales y escuelas mientras que otros huían hacia otras zonas.
El ejército hebreo golpeó más de 200 objetivos donde había explosivos escondidos, túneles, rampas de lanzamiento de cohetes y centros de mando islamistas. La reanudación de los combates dio el portazo a la esperanza de extender la tregua vigente desde el 24 de noviembre, que permitió canjear a decenas de rehenes y presos palestinos en Israel y facilitó el ingreso de ayuda al enclave atestado de camiones.
Tel Aviv y los terroristas se culpan mutuamente del fracaso de las negociaciones para prolongar la tregua, y lo atribuyen en parte a desacuerdos sobre la liberación de rehenes.
Estados Unidos seguía intensamente focalizado en liberar a los rehenes cautivos en Gaza y pido zonas seguras para los civiles por los bombardeos.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que Hamás "violó"; el acuerdo al "disparar cohetes"; hacia Israel.
"El gobierno hebreo está decidido a lograr los objetivos: liberar a los rehenes, eliminar a Hamás y garantizar que Gaza nunca más represente una amenaza para el pueblo de Israel", dijo su oficina en un comunicado.
En tanto, Hamás recibirá la madre de todas las palizas, prometieron desde el gobierno de Tel Aviv. Los terroristas islamistas dijeron que murieron otros 5 rehenes. Mientras que tres periodistas se suman a la lista de los que cayeron por el fuego israelí.
