Los presidentes de Rusia y China, Vladimir Putin y Xi Jinping, iniciaron una cumbre oficial en Moscú, en una demostración de la fuerza de su alianza en medio de severas tensiones entre ambos países y occidente por la guerra de Ucrania.
Putin aseguró que ambos países tienen numerosos objetivos en común y alabó al gigante asiático por su posición justa y equilibrada sobre los temas internacionales más urgentes.
El jefe del Kremlin dijo que estaban abiertos a negociaciones sobre Ucrania y elogió la propuesta de paz de China. Putin, anunció que se verá obligado a reaccionar si Gran Bretaña le da a Ucrania suministros militares, incluidas municiones perforantes que contienen uranio empobrecido.
Por su parte, Xi declaró que su nación está dispuesta a mantenerse firmemente al lado de Rusia en aras de un verdadero multilateralismo. Además de la compleja situación geopolítica, los temas económicos también centrarán el encuentro entre Putin y Xi.
Rusia y China potencian su alianza comercial
El viaje del líder chino tiene lugar en momentos en que Rusia reorienta su economía hacia Asia para esquivar las sanciones occidentales en su contra.
Ejemplo de ello es el anuncio del gigante ruso Gazprom, que suministró el lunes un volumen récord de gas a Beijín a través del gasoducto transfronterizo de Siberia.
Según el Kremlin, Xi y Putin firmarán varios documentos, entre ellos una declaración común para profundizar sus relaciones económicas antes del 2030.
