El presidente Alberto Fernández recibe a parte de su gabinete en la Quinta de Olivos y analiza junto a expertos de la comunidad científica si es conveniente una parálisis total de la actividad y una cuarentena obligatoria para toda la población con el objetivo de frenar el avance del coronavirus en Argentina.
A la quinta presidencial arribaron el ministro de Hacienda, Martín Guzmán, la titular de Seguridad, Sabina Frederic y el titular de Salud, Ginés González García. También llegó pasadas las cinco de la tarde el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y se espera la llegada además del ministro de Educación, Nicolás Trotta. El gobernador bonaerense Axel Kicillof también está en Olivos.
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La medida podría implicar la suspensión de las clases tal como ocurrió en otros países del mundo, inclusive en algunos vecinos, como Chile. Fernández podría anunciar luego de la reunión estas medidas mediante un mensaje por cadena nacional.
En declaraciones radiales, el Presidente dijo este domingo que invitó especialmente, para analizar futuras medidas, a los jefes de las carteras de Educación a nivel nacional y de la provincia de Buenos Aires. "Lo invité a Axel con sus ministros de Educación y Salud, porque (Buenos Aires) es la provincia más afectada de todas por esa decisión, si eventualmente se tomara", dijo al respecto.
En ese sentido, explicó que durante las últimas reuniones "absolutamente todos los científicos nos dijeron que suspender las clases no era conveniente en primaria y secundaria, porque el grado de infección en esos chicos es muy bajo y además es una enfermedad que los chicos se recuperan con facilidad". Y agregó que otra de las variables que analizaron los expertos es quién quedaría al cuidado de los niños si no van al colegio y sus padres deben trabajar.
"Estamos evaluando una cuarentena obligatoria, un corte en todo el país", dijo Alberto Fernandez
El primer mandatario adelantó que el Gobierno analiza detener toda circulación para que las personas se queden en sus casas y eviten la propagación del virus, que hasta ahora ya suma 46 infectados. "Si la gente no circula, el virus tampoco", dijo Alberto Fernández.
No obstante, la preocupación es además que un cese total de actividades para evitar la propagación del virus "tendrá un impacto negativo en la economía". Por ese motivo será necesario analizar medidas con el titular de la cartera de Economía para paliar los efectos que generaría el virus en la actividad económica, sobre todo en áreas como el turismo y el entretenimiento, que ya restringieron varias actividades a nivel provincial y nacional.
MC
