Mientras se espera que el proyecto por la despenalización y legalización del aborto sea tratado en el Senado de la Nación, médicos de clínicas privadas, sanatorios y hospitales de distintos puntos del país salieron a manifestar su postura contraria a la ley; sobre todo al artículo que refiere a la objeción de conciencia, que se supone debe ser individual y no institucional.
En ese contexto, en un comunicado firmado por las clínicas San Juan de Dios, San Camilo, Bazterrica, Santa Isabel, Del Sol, Fleni, Austral y Mater Dei reclamaron porque se modifique este punto, alegando el rechazo generalizado de todos los médicos de sus instituciones a la práctica y las complicaciones que supondría generar el registro de los objetores entre todo el personal de salud.
“Abogamos por una legislación que respete la objeción de conciencia individual e institucional, que respete la libertad de pensar y de creer, de asociarse y de trabajar, de cuidar y de curar, de salvar y de sanar, sin que se corra el riesgo de prisión, de inhabilitación o de clausura por actuar de acuerdo a su propia conciencia e ideario”, reza el escrito.
En línea con este reclamo, médicos de clínicas del interior del país, de provincias como Formosa, Chaco, Misiones, Mendoza, Córdoba, Santa Fe, entre otras. adhirieron y buscaron manifestar públicamente su rechazo. En Mendoza, por ejemplo, el miércoles se hizo un “chaquetazo”, una movilización que incluyó una “colgada de chaquetas contra el aborto”, como lo definieron los profesionales que participaron. El jueves, en Misiones, médicos y estudiantes de medicina también salieron a decirle no al proyecto a la calle, mientras que en la ciudad de Salta realizaron un abrazo simbólico al Hospital Público Materno Infantil.
Postura. “Estamos preocupados porque creemos que esta es una ley que avasalla la libertad del ejercicio de la medicina, y que no está clara la objeción de conciencia personal o institucional”, dice Fernando Iudica, director del Hospital Austral. Pero insiste con que, más allá del reclamo por la objeción institucional que llevan adelante, el rechazo principal es contra la ley en sí. “No defiende el principio que sostenemos, que es ayudar a las dos vidas. No estamos encaprichados con que las cosas no salgan. Entendemos la desesperación de una chica que tiene un embarazo no deseado, y que tiene que haber un sistema que la acompañe. Pero también hay que tener las herramientas y acompañar a ese bebé que está formándose en el útero de la mujer, que también tiene sus derechos”, agrega.
Consultada por distintos medios, la diputada de Cambiemos Silvia Lospennato hizo hincapié en que la iniciativa contempla el caso de que todo el personal sea objetor, y dijo que “no es verdad que la ley no permita la derivación en caso de que todos los profesionales de un hospital o institución sean objetores de conciencia”.
Escrache a Rubinstein
El ministro de Salud de la Nación, Adolfo Rubinstein, debió suspender el viernes una disertación sobre la cobertura universal de salud en Tandil porque manifestantes de la agrupación MásVida de esa localidad lo esperaban con carteles y cánticos contra la legalización del aborto. Ayer, diputados de todo el arco político salieron a repudiar ese escrache al ministro Rubinstein. “Que no ganen los violentos”, escribieron en redes.
