Por primera vez, las pruebas Aprender –cuyos resultados se dieron a conocer el jueves (ver aparte)– incluyeron una consulta sobre la aplicación de los contenidos de la educación sexual integral (ESI), y las respuestas sorprenden.
Si bien el 98% de los directivos de las escuelas primarias dicen que en su establecimiento se aplica la ESI, y los docentes plantean tener altos niveles de acceso a los materiales (99% dijo que sí posee y utiliza materiales para abordar los contenidos de ESI en clase) y aceptables niveles de capacitación –siete de cada diez dicen que recibieron formación en ESI–, para los alumnos esos contenidos aún no llegan de forma eficiente.
Según las respuestas brindadas por los 574 mil estudiantes de sexto grado de 19.600 establecimientos públicos y privados de todo el país, solo la mitad haber recibido contenidos sobre embarazo, y el 43% en métodos de prevención del embarazo y enfermedades de transmisión sexual.
En cuanto a los temas de abuso, solo el 37% declaró haber tenido clases sobre cómo evitar el abuso sexual, entre otros aspectos fundamentales que contempla la resolución del Consejo Federal de Educación Nº 340/18. Para Mercedes Miguel, secretaria de Innovación y Calidad Educativa de la Nación y responsable, entre otros, de los programas de ESI y ENIA (Plan Nacional de Prevención del Embarazo No Intencional en la Adolescencia), el tema se convirtió en “prioritario: queda un gran trabajo por hacer, porque aún tenemos más de cien mil chicas menores que se convierten en madres todos los años”, asegura.
Para monitorear el seguimiento de la implementación de los contenidos de la ESI, cuya ley está vigente desde 2006, el ministerio hizo un convenio con Unicef para que “se observe y se trabaje sobre este eje. Buscamos información en la voz de los docentes y de los alumnos”, explica sobre la inclusión del anexo en el cuestionario de esta edición de Aprender.
Las preguntas más vinculadas con cuestiones generales de la educación sobre el cuerpo fueron respondidas con niveles más altos por los alumnos: el 86% dijo haber recibido clases sobre “el cuidado del cuerpo y la salud” y el 76% sobre “los cambios del cuerpo en la adolescencia”; pero solo el 55% respondió afirmativamente a la premisa “diversidad de las personas, orientación sexual e identidad de género”; y el 55% dijo haber aprendido sobre “cómo prevenir el maltrato”.
“Lo que se venía haciendo era una campaña de capacitación para docentes –hay más de 400 mil materiales de ESI entregados en escuelas de todo el país–, pero empezamos a prender alarmas en cuanto se les consultaba a los jóvenes si la información ‘bajaba ‘en forma suficiente”, justifica Miguel. El ministerio presentará un informe más exhaustivo en un mes.