A pesar de las medidas impuestas por el Gobierno nacional, una multitud de gente intenta volver a su casa y en la estación de Once se produjo una "avalancha" de personas que intentaban ingresar a la estación mientras la Policía buscaba controlar el ingreso. Además, en los trenes los pasajeros viajan parados y amontonados.
De esta manera, las limitaciones impuestas por el Gobierno para los viajes en tren se veían completamente desbordadas por centenares de usuarios. En Once y Constitución, en menor medida, se observaron escenas de descontrol, con vallados derribados y una avalancha de pasajeros avanzando.
En Constitución, las formaciones de la línea Roca, tal cual había sucedido en el horario pico matutino, partían con los vagones desbordados de usuarios pese a la disposición oficial para que solo pudieran viajar pasajeros sentados.
En Once, efectivos de la Policía Federal intentaron vallar el acceso para limitar la cantidad de personas que pudieran ingresar al hall de acceso a los andenes. La iniciativa fue sobrepasada por completo por centenares de usuarios ansiosos por regresar a sus hogares tras la jornada laboral.
Inclusive se intentó cerrar una persiana en el acceso de la calle Bartolomé Mitre, pero la idea derivó en una mayor presión de la gente, temerosa de quedarse afuera y perder la posibilidad del retorno en tren. Luego del ingreso desesperado de la gente, finalmente los Policías lograron cerrar la persiana para poder controlar mejor el ingreso de las personas.
Los trenes se suman a los subtes y aumentan restricciones por el coronavirus
El descontrol sucedió a pesar de los anuncios del ministro de Transporte, Mario Meoni, quien aseguró que -desde el jueves- no se podrá viajar parado en el transporte urbano de pasajeros de trenes y colectivos, disposición que regirá hasta fin de mes. La medida también incluye a la red de subterráneos de la ciudad de Buenos Aires.
Además, el funcionario también anunció la suspensión de "manera total" de las operaciones de trenes y colectivos de larga distancia, y de vuelos de cabotaje, entre el viernes 20 y la medianoche del miércoles 25 de marzo, una medida destinada a "desalentar la circulación" de la población durante el fin de semana largo en el marco de las medidas adoptadas para prevenir la propagación del coronavirus.
En tanto, el funcionario había asegurado que desde la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) "se va tener un control muy férreo" para que eso "se cumpla" y ponderó nuevamente que "estas medidas las trabajamos con el gobierno de la Ciudad y de la provincia de Buenos Aires". Para que se cumpla esa disposición, habrá agentes de la CNRT que aplicarán sanciones, en caso de incumplimiento, indicaron fuentes del Ministerio de Transporte.
Sin embargo, la estación de Once se vio completamente desbordada horas antes de que el Gobierno declare la cuarentena obligatoria para todas las personas del país.
ED
