Un día para la buena onda: el primer viernes de octubre es el Día Mundial de la Sonrisa. Se celebra desde el año 1999, por iniciativa de Harvey Ball, el creador del ícono devenido símbolo de la Carita Feliz (Smiley Face). Una muy buena iniciativa, ya que no hay llanero más solitario que quien no logra arrancar una sonrisa.
Sea “alta”, “media” o “baja” según el porcentaje de dientes que deje a la vista; involucre al músculo cigomático, el mayor responsable de la sonrisa; esconda lágrimas amargas o brote de ese territorio vano y sin nombre que reúne las fronteras del reír y sonreír, hoy definitivamente es un día para sonreír.
Harvey Ross Ball, el creador del primer emoticón mundialmente aceptado en el mundo, encontró siempre motivos para sonreír a pesar de que sólo cobró US$ 45 por su creación icónica, casi inmortal.
Fue héroe condecorado en la Segunda Guerra Mundial y, al regresar del frente, abrió una agencia de publicidad, en Worcester, su ciudad natal en Massachussets. En 1963, la Compañía de Seguros de Vida Mutua del Estado de Worcester lo contrató para lanzar una “campaña de amistad”, que mejorara la moral de los empleados, bajoneados por el cambio de dueños de la empresa.
El día de la carita feliz
A Harvey Ball le llevó tan solo 10 minutos crear su círculo amarillo con una línea de boca sonriente. Como se utilizaría de sticker en las botoneras, pensó que se invertiría fácilmente y terminaría sugiriendo el efecto contrario de tristeza. Entonces le agregó los ojos.
Ni Ball ni la compañía de seguros se molestaron en registrar la marca y la carita feliz recorrió el mundo desde entonces sin que su creador percibiera un solo centavo extra por la utilización de la imagen.
Su familia dijo que no lo lamentó, porque nunca le interesó ser rico. Vivió exactamente 80 años, hasta que su sonrisa se apagó en el año 2001. Sin embargo, la creación de la Harvey Ball World Smile Foundation en su honor, lo hará brillar eternamente.
La organización que lleva su nombre realiza todos los años actividades para obras benéficas que lleven alegría a todas las personas alrededor del planeta y recaudan fondos para ellas.
Intentar una sonrisa
Los médicos saben cuántos remedios ahorran las sonrisas a tiempo. Y Hunter Doherty "Patch" Adams, lo sabía mejor que nadie. Su historia se hizo mundialmente conocida cuando llegó al cine (1998) con la nariz de payaso de Robin Williams.
Fundador de la risoterapia (1972) y del Instituto Gesundheit! Su ONG recluta voluntarios de todas partes del mundo y con ellos visita distintos países, vestidos de payasos, repartiendo sonrisas y esperanzas en un esfuerzo por llevar el humor a huérfanos, pacientes y caritas tristes y sucias.
Hoy, Patch Adams, como todos siguen llamándolo, tiene un cargo público en Estados Unidos, es Secretario de Salud para la Salud Holística, pero sigue dando conferencias por las que cobra €11.000, que dona a su fundación; sólo recibe un sueldo de US$45.000, lo que necesita para vivir.
En 2005, estuvo en el Hospital Garrahan de Buenos Aires y en 2013 hizo sonreír a muchos en algunos hogares infantiles del partido bonaerense de General San Martín.
El mundo está lleno de amarguras, pero también de sonrisas. O dicho de otro modo, qué mejor que los payasos para adentrarse en ese terreno misterioso en que las lágrimas ríen y las sonrisas lloran.
Y a menos que una se llame Monna Lisa o sea Buster Keaton, el actor cómico a quien por contrato prohibían sonreír, existe una larga lista de personalidades que, de las cosquillas en adelante, lo intentaron todo para desdibujarnos al menos el entrecejo de la frente. Comencemos…
Día Mundial de la Sonrisa: 12 razones
- “La curva más hermosa de una mujer es su sonrisa” (Bob Marley)
- “Las arrugas solo deberían indicar dónde han estado las sonrisas” (Mark Twain).
- “Es más fácil obtener lo que se desea con una sonrisa que con la punta de la espada” (William Shakespeare)
- “Y que placer, cuando no hay nada, que pueda ver, y solo invento tu sonrisa, y apago así, toda agonía” (Luis Alberto Spinetta)
- “El niño reconoce a la madre por la sonrisa” (Leon Tolstoi)
- “Fíjese que cuando sonríe se le forman unas comillas en cada extremo de su boca. Esa es mi cita favorita” (Mario Benedetti)
- “Todos deberíamos saber todo el bien que una simple sonrisa puede hacer” (Madre Teresa de Calcuta)
- “Sonreír es definitivamente uno de los mejores y más bellos remedios” (Paulo Coelho)
- “Las personas que tienen una sonrisa permanente en su cara, ocultan una fortaleza que es casi aterradora” (Greta Garbo)
- “Alguien que elige sonreír antes que enfadarse, es una persona realmente fuerte” (David Schary)
- “Una gran sonrisa es un bello rostro de gigante” (Charles Baudelaire)
- “Se necesitan cuarenta músculos para arrugar una frente, pero sólo quince para sonreír” (Swami Sivananda)
Muchas caritas felices
Aunque tienta entregarle el primer premio a Julia Roberts, dueña de la sonrisa más fresca de Hollywood, una encuesta reciente, realizada por una empresa estadounidense de productos para la higiene y la belleza bucal, otorgó ese lauro a la actriz y cantante Jennifer López. Halle Berry la siguió en el segundo puesto de la lista y Denzel Washington lideró la categoría de las sonrisas masculinas.
Más o menos auténticas, muchas personalidades nos arrancaron sonrisas con su ingenio o nos regalaron otras, imborrables. He aquí una apretada lista que cada uno completará a su gusto, a continuación:
Il Gattopardo (Luchino Visconti, 1963).
