Paul Krupnik, abogado del ayudante de gasista detenido por la explosión del edificio de Rosario, apuntó contra la empresa Litoral Gas y consideró que Pablo Miño está "destinado al sobreseimiento”.
En este sentido, el letrado reclamó que sean convocados a declarar las autoridades de la empresa al definir a su cliente, acusado de "estrago culposo seguido de muerte" junto al gasista con el que trabajaba, como "el pibe de los mandados".
El abogado argumentó que "un muchacho que es un changarín, con todo respeto, el pibe de los mandados, está preso desde hace dos días y ninguna autoridad de Litoral Gas tuvo que ir al tribunal a explicar algunas cuestiones técnicas".
Además, explicó que "él se quedó allí y podía haber muerto también en esta tragedia, y el estar privado de su libertad es una circunstancia que agrava todo esto".