Ante las catastróficas inundaciones en distintas localidades del norte de la provincia de Buenos Aires, el Gobierno realizó una denuncia por la construcción de presuntos canales clandestinos que habrían provocado la subida de las aguas. La presentación la hizo la Subsecretaría de Recursos Hídricos, dependiente del Ministerio de Planificación Federal a cargo de Julio De Vido.
La denuncia presentada ante el juez federal Rodolfo Canicoba Corral solicita que "se instruya el pertinente sumario tendiente a comprobar si (las acusaciones) configuran delitos penales contra la seguridad pública, tipificados en los artículos 186 y 196, en función del 194 del Código Procesal Penal de la Nación".
Ahora la Justicia deberá investigar si la supuesta construcción de canales clandestinos provocó las inundaciones en distintas localidades del norte de la provincia de Buenos Aires. Hasta el momento, la suba de las aguas provocaron alrededor de 3.000 evacuados y la muerte de dos personas.
Qué pasó. San Antonio de Areco se inundó debido al desborde del rio que cruza la localidad, provocando la inundación de 90 hectáreas urbanas. De inmediato, el Gobierno señaló que la construcción de canales clandetinos por parte de los productores rurales colaboró con la subida de las aguas.
Salto, Rojas y Pergamino (donde se produjeron las dos muertes), entre otras ciudadaes del norte de la provincia de Buenos Aires, fueron las más afectadas por las inundaciones. Ante las acusaciones del Gobierno, los productores rurales (que aceptan la posibilidad de canales clandestinos) responsabilizaron a las fuertes lluvias y la falta de capacidad de los diques de contención.