Un grupo de desconocidos se robó botellones con 20 mil litros de agua para repartir entre personas con pocos recursos en Coronel Du Graty, una población de 15.000 personas ubicada a 300 kilómetros de Resistencia, mientras una de las peores sequías castiga al Chaco.
Además del costo económico del agua, la demanda aumentó debido a la sequía que sufre la provincia y a la falta de un sistema eficaz de agua potable que hace que los ciudadanos dependan de aljibes que están secos desde que no llueve hace meses.
El intendente municipal, Alfredo Pastor, aseguró que está convencido de que los ladrones "se llevaron el agua para venderla. Ya tenemos identificado quién organizó todo esto, pero lamentablemente no tenemos la forma de probarlo", según señala el Diario Clarín.
"Es un servicio social, donde cobramos un valor casi simbólico, de cuatro pesos, por cada carga de agua", indicó. Un botellón de agua potable cuesta en la zona entre 10 y 12 pesos, y una carga de 3.000 litros de agua dura –utilizada para limpieza e higiene- ronda entre los 50 y los 60 pesos.