A dos semanas del inicio del convenio entre el Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, (DGAI) y la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), se detectaron “conductores temerarios” que fueron sancionados severamente, ordenado el bloqueo de sus licencias de conducir y en estudio la suspensión definitiva de esas licencias.
Estos infractores fueron detectados como responsables de faltas graves en una cantidad de mas de diez infracciones en los últimos seis meses.
Fueron sancionados con multas que van desde las 1.250 unidades fijas, que equivalen a $ 72.962,5. Como se sabe, cada unidad fija equivale al valor del medio litro de nafta de mayor octanaje acorde a valores actualizables por la Dirección General de Estadísticas y Censos del Gobierno porteño, actualmente establecido en $ 58,37.
La multa más alta impuesta ha sido de 34.850 unidades fijas equivalente a $ 2.021.300, a valores actuales.
De acuerdo con las nuevas normativas establecidas, las denominadas faltas graves son alcoholemia, exceso de velocidad, violación de semáforo, uso del celular o videos o mensajes de texto al conducir, imprudencias de motociclistas (no uso de casco y menores de 16 años como acompañantes), no uso del cinturón de seguridad, no uso de retención infantil o llevar menores en asiento delantero.
En una primera etapa de implementación del convenio firmado hace solo dos semanas entre la Agencia Nacional de Seguridad Vial y el Ministerio de Justicia y Seguridad se detectaron 306 personas físicas que reunían los requisitos necesarios para la aplicación del convenio, es decir, registraban diez o más faltas denominadas graves en los últimos seis meses.
De ese total de 306 personas físicas con licencias de conducir, veinte de ellas fueron condenadas y serán informadas por Dirección General de Administración de Infracciones (DGAI) a la ANSV para que evalúen la posibilidad de la suspensión definitiva de dicho permiso de conducir y casi todas las resoluciones fueron notificadas a través del propio sistema de notificaciones electrónicas diseñado y puesto en marcha por la propia Dirección General de Infracciones del Gobierno porteño (Sinei) en los últimos dos años.
Esto hizo posible que un sujeto renuente a cumplir con las normas de tránsito pueda ser detectado, bloqueada su licencias de conducir, sancionado y notificado de todo esto.
El circuito previsto consiste en que la ANSV analiza información de infracciones comprobadas y suministrada por la DGAI.
En la Argentina, los siniestros viales son la principal causa de muerte en jóvenes menores de 35 años, y por eso la inseguridad vial, de acuerdo con esta realidad, debe entenderse como un problema de salud pública que necesita de cambios profundos para lograr una nueva cultura vial. Por este motivo, la ANSV elaboró la propuesta legislativa para erradicar el alcohol de la conducción a nivel federal.
Tolerancia cero al volante
La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) reiteró ayer su propuesta de avanzar con una ley de alcohol cero al volante en todo el país, en el marco del Día Nacional de la Seguridad Vial que se conmemora todos los 10 de junio.
En este sentido, y como punta de lanza para lograr este objetivo, la Agencia Nacional de Seguridad Vial, organismo del Ministerio de Transporte, impulsa el proyecto de Ley de Alcohol Cero al volante en todo el territorio nacional, una iniciativa que “suma cada vez más voces a favor y que es necesaria, como respuesta a las miles de vidas que se pierden cada año en siniestros viales provocados por conductores alcoholizados”, explicaron en un comunicado.
El director ejecutivo de la ANSV, Pablo Martínez Carignano, señalo: “El alcohol está presente en una de cada cuatro muertes en siniestros viales y aun así tenemos la ley con mayor tolerancia de toda la región. En Uruguay, Paraguay y Brasil tienen Alcohol Cero y Chile tiene 0.3. Nosotros seguimos con el absurdo 0.5”.