Entre el miércoles y el jueves próximo, en la estación Medrano de la línea B de subtes comenzarán los trabajos para blindar las bocas de expendio de boletos. Será ésta la primera de un total de 15 boleterías en las que el gobierno porteño, a través de la empresa estatal Sbase, se comprometió a reforzar la seguridad antes de fin de año, luego del reclamo y las medidas de fuerza tomadas por los metrodelegados.
La inversión destinada a estas obras es de casi 2,8 millones de pesos, un monto muy superior a los poco más de diez mil pesos promedio que fueron sustraídos de las cajas en cada uno de los últimos robos.
Concluida la primera, las tareas continuarán en la estación Florida de la misma línea. Desde Sbase todavía mantienen el misterio sobre la ubicación de las 13 restantes.
El blindaje de las clásicas boleterías consiste en el reemplazo de ventanas, ventanillas y puertas. También en el armado de mampostería antivandálica. En aquellos casos en que la boca de expendio presente un sistema modular, los trabajos contemplarán el blindaje completo del frente, laterales, techo, ventanilla, marcos, vidrios y mostrador interno de la caja del boletero.
Además del blindaje, el plan contempla la instalación de 1.600 cámaras en boleterías, andenes, transferencia entre líneas y en talleres, la incorporación de más efectivos de la Policía Metropolitana (actualmente hay 400 y se espera que para fin de año sean 550) y el apoyo de varias decenas de personal de seguridad privada, que si bien no estarán armados llevarán consigo botones antipánico para dar aviso inmediato a la policía en caso de necesidad. También aumentará en varias decenas el número de efectivos de civil que ya recorren las seis líneas, abocados a tareas de prevención contra oportunistas. Para el seguimiento de las cámaras se montarán dos centros de monitoreo. Uno estará en la zona de Chacarita y otro en Barracas, donde funciona el Ministerio de Seguridad y parte de las oficinas de la Policía Metropolitana.
Robos. Según contaron a PERFIL fuentes de Sbase, en un año, bajaron los robos en boleterías. Durante el primer semestre de 2013 se registraron 35 mientras que en el mismo período de este año, sólo hubo cuatro. El dato, explicaron, se debe a la implementación de procesos tendientes al resguardo de valores en cajas inviolables dentro de las boleterías. Sin embargo, las estadísticas no coinciden con las que manejan los metrodelegados. Néstor Segovia, desestimó la merma de asaltos y explicó que al año suelen robar alrededor de cincuenta boleterías. El último, de hecho, sucedió el pasado 2 de junio en la estación Castro Barros de la línea A.
