La cúpula del PRO afloja tensiones en festejo con pileta. Si algo saben hacer en el macrismo es separar el trabajo y la tensión que éste genera de los momentos de dispersión. Por eso la ajetreada semana que tuvieron en las filas del PRO por el traspaso de los subtes no impidió que la cúpula del partido derrochara alegría en una casona en Nordelta. El anfitrión y cumpleañero era Andy Freire, asesor estrella de Mauricio Macri que, por supuesto, no quiso perderse la velada –se quedó hasta pasadas las tres de la mañana– y fue acompañado de Juliana Awada y sin Antonia, de paradero desconocido para el común de los invitados. Lanzado por la fuerza a la pileta Freire, en una práctica habitual de los macristas, caminaban con ojos en la nuca los funcionarios Marcos Peña, Daniel Chaín, Nicolás Caputo, Esteban Bullrich, Guillermo Dietrich –que también cumplió años pero festejó en familia– y Horacio Rodríguez Larreta con una Bárbara Diez, que por su figura bien ganada tuvo la envidia de otras invitadas. Hubo comentarios sobre la, para algunos, sorpresiva presencia de “Pancho” Cabrera, que pese a estar comenzando un apasionado romance con Gloria Fiorito, lejos estuvo de refugiarse y acudió sonriente de la mano de su conquista. El gran nivel del catering fue aprobado por un glotón Emilio Monzó, que dialogó con empresarios como Martín Migoya y Santiago Bilinkis. El rabino Bergman también fue de la partida y más de uno no podía creer el poder de convocatoria del anfitrión, para la opinión de muchos, un hombre oculto dentro de la estructura del PRO, pero que evidencia cierto poder a la hora de hacer una convocatoria que completaron, nada menos, que Eduardo Elsztain y Gustavo Grobocopatel.
Mujeres al borde de... Como homenaje por su día, veinte mujeres top fueron agasajadas por Alan Faena y Wally Diamante con un almuerzo en el restó El Mercado del hotel que lleva el apellido del empresario. Marcela Tinayre; Teté Coustarot, María Kodama, Evangelina Bomparola, la abogada Mariana Gallego, Nacha Guevara y Dolores Blaquier, entre otras, devoraron todo lo que estaba a su alcance y hasta tuvieron tiempo para repartirse antidemocráticamente –tironeos de por medio– unos regalos de la marca Hermes, dispuestos en menor número que cantidad de invitadas. Imposibilitada de participar de esa disputa física, la bella Dolores Blaquier se quedó sin bolsita. Como consuelo recogió varios elogios por su look, que incluyó un turbante de su abuela y unos lentes tipo John Lennon. Por su juventud, Blaquier fue la que más cerca estuvo de lograr ingresar a la pileta del hotel, donde descansaba en remojo el cantante Roger Waters. Sin embargo, tres guardaespaldas se guardaron el derecho de admisión al lugar y ninguna de las veinte, incluída Nacha Guevara, con más de 70 años y ninguna arruga, logró superar la barricada humana.
Se populariza el jockey. Pese a que las campañas están destinadas a públicos diferentes, más que extraño resulta que Boca Juniors y el Jockey Club coincidan en la modalidad que utilizan para conseguir nuevos socios. Desde el edificio de la avenida Alvear dicen que Enrique Olivera prepara para los 130 años de la institución un plan de facilidades para asociar a familiares de los socios, que cada vez son más los que pasan a la categoría vitalicios. Si bien el plan deberá ser aprobado por la comisión directiva, no fueron pocos los que ya han dado el visto bueno a la iniciativa.
Suelos africanos. Aunque no formó parte del periplo de empresarios argentinos por Angola, otro de los hombres de negocios locales que también busca ampliar sus negocios en suelo africano es Eduardo Eurnekian. Pero, al dueño de Aeropuertos no le interesa tanto el potencial del país, que visitó la pintoresca comitiva encabezada por Guillermo Moreno, sino que desde hace tiempo piensa en expandir las plantaciones de olivo que tiene en Marruecos y llevar ese tipo de producción a Argelia.
Invitación a medias. El Supermartes en Estados Unidos fue seguido desde Buenos Aires con moderada atención por políticos y empresarios. La Embajada de EE.UU. convocó a seguir la jornada desde las pantallas de un bar porteño. Las horas en el lugar transcurrieron entre sándwiches, picadas y el clásico pollo frito que resultó demasiado picante para algunos. La victoria, ajustada, de Mitt Romney no sorprendió tanto a los tertulianos como cuando alguien aclaró que las exquisiteces formaban parte de la invitación de la Embajada, pero cada uno debía hacer frente a la abultada cuenta de bebidas que llegó religiosamente a las mesas.
Vendimia solidaria. En un caluroso almuerzo de domingo, Daniel Vila juntó a 300 personas en su estancia mendocina San Isidro para celebrar con gran éxito –recaudó 5,4 millones de pesos en donaciones– lo que se llama Vendimia Solidaria. Sufría las altas temperaturas una embarazadísima Pamela David aunque más aun sudaron tres ex gobernadores mendocinos Rodolfo Gabrielli, Roberto Iglesias y Celso Jaque, que está próximo a partir hacia Bogotá, donde será embajador. También concurrieron las estrellas del Canal América y los intendentes de Mendoza, “Viti” Fayad y de Rosario, Mónica Fein, quienes departieron largo y tendido sobre temas culturales. Gran sorpresa causó la actuación de “Palito” Ortega a las cinco de la tarde, como también la incursión espontánea de Ricardo Fort, que luego se retiró no sin antes dejar su proletaria donación de 100 mil pesos.
Percepción nuclear. A un año del accidente de Fukuyima, la Comisión Nacional de Energía Atómica está buscando una consultora para realizar un estudio de opinión pública que determine cuál es la “percepción ciudadana” respecto del desarrollo de este tipo de fuentes energéticas en la Argentina.
Panorama rioplatense. El empresario uruguayo Pedro Baridón armó, a su estilo, una reunión informativa. El objetivo: poner al tanto de lo que sucede en el Río de la Plata al petrolero neoyorquino Marshall Weiss, de paso por suelo charrúa en búsqueda de inversiones. Baridón convocó la cita en su imponente residencia “El Caburé” de Punta del Este, sobre La Brava, y entre los invitados para trazar un panorama de lo que sucede en la región estuvieron la dueña del diario charrúa El País, Julia Rodríguez Larreta; Jorge Pereyra de Olazábal, como representante del Consejo de las Américas, y como sinónimo de la unidad de las dos orillas, Teddy García Mansilla y su mujer (argentino-uruguaya) Verónica Pueyrredón. Estuvo también Enrique Larreta y Carlos Fontán. En una reunión que contó con abundantes variedades de salmón para acompañar, Weiss se llevó un panorama tentador. El hombre consideró que la inversión en campos en Argentina y Uruguay es más que tentadora por los precios. A tal punto que insistía en ese punto en el desayuno en el que participó al día siguiente en el Yacht Club vecino. Allí estuvo también Pereyra de Olazábal, que hablaba a su vez de la fundación Puente para las Américas que presentará el próximo miércoles en La Rural.
La Bendita. Entre sándwiches de miga, gaseosas y una picada de campo, el legislador porteño Daniel Amoroso y su par bonaerense Mauricio D’Alessandro presentaron La Bendita, una agrupación plural con la que planean tener presencia en todas las comunas de la ciudad como en cada uno de los 134 distritos de Buenos Aires, e intentarán jugar fuerte en las próximas elecciones de 2013. En uno de los salones de la Cámara baja bonaerense congregaron a dirigentes y concejales de varias zonas de la Provincia, como Ramallo, Chivilcoy, Morón y San Isidro. En el evento se prometió que la agrupación no será sectaria ni pedirá el carnet de afiliado para admitir a todo aquel que quiera sumarse. También se arengó a llegar a las masas, un mandato que un dirigente de la Provincia se tomó muy en serio y, en ese sentido, atacó con esmero una bandeja recién llegada de una confitería.
Chapa y pintura. Daniel Maman cuida su Porsche color negro tanto como a las obras que atesora en su galería. Sin embargo, a veces realiza maniobras propias de quien pilotea un cascajo. Días atrás colocó la marcha atrás sobre Libertador y San Martín de Tours y la parte trasera de la impecable carrocería golpeó con el carro de un cartonero. Enfurecido, Maman se bajó para constatar la desafortunada existencia de un rayón y, de inmediato, volvió a subir a su nave no sin antes dedicarle al vagabundo un ramillete de maldiciones.
Encuentro ‘bon vivant’. En la localidad sanjuanina de Barreal, una especie de oasis en el desierto y con un Valle del Leoncito que sirvió de escenario para las más memorables publicidades, se jugó un buen partido de polo que terminó empatado y todos los goles se hicieron en el mismo arco, puesto que el viento soplaba de lo lindo. Allí mismo Pierre Lurton y Ramiro Otaño fueron los anfitriones de un centenar de amigos del buen vino y, entre ellos, varios miembros de la Academia Argentina de Gastronomía, como María Podestá, Enrique Duhau, Lucy de Pescarmona, Patricio Kelly, Pablo Sánchez Elía, que degustaron con fruición variedad de vinos y también champagne, que los ayudó a soportar cualquier calor. Hubo también invitados de otras partes del mundo –Shangai, Sudáfrica, Tokio, Nueva York y México–, que llevó a un cómico contertulio a comparar el convite con una reunión de la ONU.
De vuelta a la mesa. Se reiniciaron las reuniones de la denominada Mesa de los martes, el foro peronista (nada K) que semanalmente debate la situación política. La primera tenida de 2012, en el Club Francés, tuvo como eje el conflicto por Malvinas. Rindió un informe, como keynote speaker, el ex vicecanciller Fernando Petrella. Recordó, entre otros aspectos, las oportunidades en que Argentina recibió ofertas de Gran Bretaña para negociar una devolución de las islas, con modalidades parecidas a las que más tarde se emplearon para devolver Hong Kong a China. Una de ellas ocurrió semanas antes de la muerte de Juan Perón, entonces presidente. “Agarre pronto, Vignes”, le dijo el viejo general a su canciller. Otro ex vicecanciller, Andrés Cisneros, participó como orador y mencionó el documento reciente de los 17 intelectuales sobre las islas. “Es un aporte muy interesante, aunque se equivocan cuando postulan que antes de que se abra la negociación se admita la autodeterminación de los isleños”, opinó. Junto a las caras habituales –Chicho Basile, Mariano Caucino, Pascual Albanese, Jorge Hugo Herrera Vegas, entre otras– esta vez hubo muchos embajadores. También se vio a Raúl Granillo Ocampo, que fue embajador en Estados Unidos, y al que fuera vocero de Guido Di Tella en la Cancillería, Jorge Raventos. El último orador de ese mediodía fue el famoso Tula: recordó su historia nacionalista y peronista y su frustrado intento de aterrizar en Malvinas cuando Isabel Perón era presidenta. Después de ese prólogo, remató con una conclusión ditellista: “Este conflicto se arregla ganando la voluntad de los isleños”. A esa hora ya se habían agotado la ensalada, el pollo y el postre.
Semana complicada. La semana que pasó colocó al ministro Julio de Vido al borde del colapso. A la salida del casi infartado Juan Pablo Schiavi, se sumó un paro nacional portuario que no se concretó por los rápidos reflejos del propio ministro. Desde Planificación trascendió la presión que ejercieron los sindicalistas marítimos y portuarios nucleados en la Fempinra, que tiene como referentes a dos espadas moyanistas, como son Juan Carlos Schmid, conocido por su desesperación mediática por figurar, y el ya octogenario Cayo Ayala. Se supo que ambos presionaban para que desembarcara una terminal portuaria de origen chino en lugar de la española Bactssa, a la que se le terminaba la concesión. Enterado de la situación, De Vido descomprimió el ambiente otorgando la extensión de la concesión a los españoles, y de esa manera garantizó las fuentes de trabajo y desactivó el paro, aunque el clima en el sector sigue siendo explosivo.
El gran DT. Después de una pretemporada liviana entre los médanos de la Costa Atlántica, el diputado de la Coalición Cívica Carlos Comi regresó, no sólo a la labor legislativa, sino además al fútbol. Sólo que en este caso, no lo hizo desde el césped sino en el banco. El hombre agarró la dirección técnica del equipo del fútbol amateur rosarino María Reina, y se lo ve entusiasmado con la nueva aventura. Lo que resultó menos auspicioso para él en términos futbolísticos fue el viaje fugaz que encaró hacia Córdoba para ver a Rosario Central, que cayó de manera categórica contra Instituto.
Turismo gastronómico. Nada mejor que terminar el verano hablando de viajes. Eso es lo que habrá pensado el diputado Ricardo Gil Lavedra, quien hace unos días salió a cenar con su mujer y una pareja amiga a un refinado restaurante de Palermo y mientras manducaba las delicias de la comida gourmet del lugar, compartía anécdotas de sus viajes por el interior del país como también por el Viejo Continente.