Víctima del incidente del comienzo de la Feria del Libro, cuando un grupo de manifestantes interrumpió su discurso en el acto de apertura para abuchearlo, el ministro de Cultura de la Nación, Pablo Avelluto consideró ayer "cuando las autoridades de la Fundación El Libro quieren hacer las cosas de una manera las hacen de una manera, y cuando las quieren hacer de otra, las hacen de otra".
Se refería de manera implícita a las condiciones de absoluta disposición que tuvo la organización de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner el pasado jueves, en ocasión de la presentación de su libro "Sinceramente", una situación claramente contrapuesta con lo que el funcionario debió soportar en aquel violento episodio de la inauguración.
En el programa "Va de vuelta", que conduce Romina Manguel en Radio Nacional, Avelluto destacó que el ente que rige la Feria, la Fundación El Libro, "está dirigida por editores que han mostrado su simpatía por el gobierno de Cristina Kirchner, lo que no tiene nada de malo, no hay ningún delito en que sean mayoritariamente kirchneristas, lo que sí me alarma es que haya hechos que se naturalicen, como silenciar al otro, patotear al como otro, como le pasó el jueves a la periodista Maru Duffard".
"Episodios como esos deterioran la convivencia democrática", enfatizó Avelluto.
Fue especialmente crítico también cuando señaló que "la Fundación El Libro ha tenido una actitud oportunista ante todos los gobiernos, incluso oficialista con la dictadura", para recalcar que "pueden brindar un acto como el del jueves, ofreciéndole a la expresidenta las garantías que ella había solicitado (...) A mi me habían dicho que no iba a suceder lo mismo que el año pasado conmigo y no lo pudieron o no lo quisieron hacer" (en el acto de inauguración).
"La expresidenta tiene derecho a presentar su libro en la Feria o en cualquier lado (...) La Feria del Libro es un acontecimiento privado, organizado por el sector privado, impone las reglas que quiere", admitió sin embargo Avelluto, refiriéndose en la parte final de la charla a la situación vivida por el periodista Ceferino Reato en la Feria: "No hay una sola línea que haya escrito Ceferino Reato de la que se pueda desprender que es un apologista del terrorismo de Estado (...) Que la Fundación El Libro haga esa consideración sobre un periodista de este calibre, me parece terrible, casi raya la censura", concluyó.
H.B.
