Desde las 21 del miércoles 19 de abril habrá apertura de molinetes y, una hora más tarde, dejarán de realizar su recorrido habitual las líneas D y E. La Asociación gremial que nuclea a los Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP – Metrodelegados) emitió un comunicado donde explicó el procedimiento y la causa de la octava medida de fuerza consecutiva.
En el documento expuesto por el sindicato encabezado por Roberto Pianelli y secundado por Néstor Segovia expresaron que el paro fue decidido en asamblea por los trabajadores como parte del reclamo a la empresa por la negativa ante el pedido de reducción de la jornada laboral a 30 horas semanales con dos francos.
Amianto: el mineral que se encuentra en el subte B y genera cáncer
El pedido de la baja de horas en sus semanas laborales, según manifestaron desde el sindicato, es para reducir la exposición que tienen los trabajadores al asbesto.
El documento firmado por los referentes del sindicato remarca también “la negativa por parte de EMOVA y SBASE a conceder nuestro reclamo llevamos adelante medidas de autodefensa".
Los reclamos vienen escalando desde fines de marzo, cuando los paros de dos horas al inicio de la jornada luego pasaron al cese de actividades entre las 14 y las 16hs. Siendo la nueva estrategia gremial implementada desde el lunes 17 de este mes, el levantamiento de molinetes y posterior paro en el horario del cierre del servicio.
Respuesta de la empresa
Desde EMOVA, a través de un comunicado, resaltaron que la disminución horaria es "incompatible con una operación adecuada de este servicio esencial y por debajo de los niveles razonables de productividad". En el mismo documento señalan que las 36 horas semanales incluyen "refrigerio y descanso, por lo que en realidad la jornada efectiva de trabajo es aún menor, con casos como el área de tráfico (conductores y guardas) en que el tiempo de trabajo oscila entre 4 horas y media y 5hs. de operación efectiva".
Paro de subte: las líneas B y C dejan de prestar servicio este lunes desde las 22
Qué es el asbesto
Este mineral inoloro puede provocar enfermedades terminales como el cáncer. El riesgo a contraer esta enfermedad se incrementa con la exposición a este mineral con el paso del tiempo
Cuando el asbesto se descompone su contacto con el aire acrecienta la posibilidad de generar células cancerígenas. Apenas una sola fibra inalada de asbesto puede contaminar al ser humano.
Según la Organización Mundial de la Salud mueren 100.000 personas al año por causas relacionadas al amianto.
El asbesto fue prohibido por el Ministerio de Salud en 2003 pero como se lo utilizaba como aislante sigue en varios lugares. Diez años atrás, una investigación del INTI lo detectó en 30 edificios de Capital federal y el conurbano.