Los metrodelegados anunciaron un nuevo paro de subte para la tarde de este viernes 14 de abril. Se trata de una medida de fuerza que afectará a las líneas A y H entre las 14 y las 16. Antes y después de la interrupción del servicio habrá apertura de molinetes.
“Seguimos exigiendo la reducción de la jornada semanal para obtener 2 francos semanales con el objetivo de reducir nuestra exposición a los múltiples factores insalubres y nocivos que afectan nuestra salud”, detallaron en un comunicado los trabajadores.
“Además, insistimos con la denuncia de la presencia de asbesto, un mineral prohibido por ley por ser altamente cancerígeno. Esta situación pone en riesgo la salud de trabajadores y usuarios, ya que ya que estamos expuestos a la posibilidad de contaminación. La empresa concesionaria insiste en desconocer esta verdadera crisis sanitaria que ya le costó la vida a 3 trabajadores, afecto a más de 80 y es un riesgo latente para millones de usuarios y vecinos de la red”, agregaron.
Para el gremio esto es “una verdadera política criminal que cuenta con la complicidad del Gobierno de la Ciudad”. “Exigimos la reducción de la jornada semanal, la desabestización inmediata de toda la red y el cambio de las flotas contaminadas”, insistieron.
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El pasado miércoles, una medida de fuerza similar afectó las líneas D, E y Premetro y a principios de semana fueron las líneas B y C las que conocieron una interrupción de servicio.
Qué dice EMOVA al respecto
Desde Emova emitieron un comunicado en el que señalan que "la compañía ha manifestado en reiteradas oportunidades su disposición al diálogo, pero la reducción de la jornada semanal resulta inviable sin afectar las actividades de operación de la red de Subte".
En este marco, Emova ratifica que "no existe en el Subte de Buenos Aires riesgo para la salud de los trabajadores y usuarios, prueba de ello son las 2.500 mediciones sobre la calidad de aire realizadas por instituciones y laboratorios especializados que fueron validados por la Agencia de Protección Ambiental del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, cuyos registros arrojan resultados muy por debajo de los niveles admitidos en la norma".
"A su vez, todos los procedimientos de desasbestización aplicados por Emova están aprobados por las autoridades del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, quienes desde la Dirección General de Protección del Trabajo han verificado que en las instalaciones del Subte no existe riesgo para la salud de los trabajadores. Emova lamenta que, pese a los intentos por sostener el diálogo por los canales adecuados, se perjudique directamente a los usuarios que necesitan utilizar el servicio para trasladarse", concluyen.
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