La familia de la niña de 11 años embarazada se presentó hoy a la Justicia para anunciar su decisión de retirar el pedido de autorización para un aborto a los tres meses de gestación. La información fue reportada por el Consorcio Nacional por los Derechos Reproductivos y Sexuales (CONDORS).
En los Tribunales de Concordia se hicieron presentes la niña -llevaba 11 semanas de embarazo por la violación de un primo de 17 años-, su madre, el padrastro y la abogada que los representa, María Susana Benítez, para retirar el recurso judicial, según informaron Diario Junio de Concordia.
Durante la audiencia ante el juez Raúl Tomaselli, la familia fue informada sobre el resultado médico de los exámenes del hospital Delicia Concepción Masvernat, donde se afirmaba que la niña está “apta físicamente para seguir con su estado de gravidez” y “afrontar el embarazo", informó por su lado Diario Uno de Paraná.
Ese diagnóstico médico contrastó con un primer informe de los médicos peritos que revisaron a la menor. Ellos, en cambio, advirtieron a "un desarrollo óseo en zonas de cadera que hacen impensable que el embarazo pudiera terminar con un final feliz (...) "Falta de desarrollo, que queda de manifiesto por la inexistencia de mamas y hasta de vello púbico".
Carolina Comaleras, integrante del Conders, dio otra versión. “No sabemos por qué hicieron eso, escapa a nuestro manejo, aunque intuimos que puede ser por la presión, la demora, la exposición”, comentó la dirigente. Luego mostró su decepción: "Como Conders nos parece terrible, esta niña va a ser madre, va a ser madre a los 11 años. Es una vergüenza nacional, provincial, es una vergüenza en todos", señaló.
"Presiones" del juez. A todo esto, el colectivo Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito denunció al juez de Menores de Concordia, Raúl Tomasselli, por “abuso de poder” y afirmaron que la madre de la niña "está siendo intimidada, presionada, manipulada para que retire el pedido de la interrupción del embarazo".
El comunicado de la organización consideró "un evidente abuso de poder por parte del juez, también de los médicos que intervinieron con pericias médicas e informes sobre la supuesta viabilidad del embarazo en la niña".
Entre Ríos se desliga. Asimismo, esta mañana la gobernación de Entre Ríos tomó distancia de las acusaciones de su posible injerencia en el caso. “El Gobierno expresa públicamente que no es de su competencia abrir juicios de valor, intervenir, decidir o tomar posición respecto del complejo suceso y a lo que indica la ley vigente”.
