Mbaracayú, Los Manglares, Talampaya, Machu Picchu, Puma, Quetzal, Folclore, Cumbia, Bailecito, Jazmín, Del Paraguay, Palo Santo, Ñandubay, Ruda, Mapuches y Kollas, entre otros, fueron algunos de los nombres que eligieron los habitantes de las Villas 31 y 31 Bis para nombrar a las calles y avenidas del reconocido barrio de la zona de Retiro.
Según el proyecto de ley que ingresó a la Legislatura porteña el lunes pasado, no solo se renombrará a las avenidas y calles del asentamiento, sino también los espacios públicos existentes en el Barrio Carlos Mugica tales como las plazas o las canchas de fútbol. La movida se enmarca dentro del proyecto de urbanización e integración social que está llevando a cabo el gobierno porteño en el lugar a partir de la sanción de la Ley 6.129.
La elección de los nombres se llevó a cabo durante los años 2018 y 2019 mediante una votación entre los vecinos que definió la nomenclatura de las arterias y espacios públicos del barrio. El proceso se dividió en cinco etapas, y votaron más de 4.700 vecinos durante los años 2018 y 2019. Las categorías que resultaron ganadoras fueron las de reservas naturales, fauna, flora, pueblos, ciudades, danzas, bailes y ritmos y pueblos originarios de América Latina, los cuales se sumaron a los nombres actuales que los vecinos ya habían otorgado a lo largo de estos años a diferentes calles del lugar, tal como el caso de la avenida 5, uno de los principales accesos al barrio.
Según se desprende del proyecto, que es impulsado por el Ejecutivo porteño, se renombrarán las 94 vías de circulación que existen en el barrio, entre avenidas prinlacilapales y calles internas. Además, se enumerarán los 29 espacios públicos que se encuentran dentro de los límites del barrio en el que viven unas 40 mil personas, según datos oficiales, pero que de acuerdo con referentes del lugar la cifra llega a los 100 mil residentes.
En los fundamentos de la normativa, en tanto, se destacó que el proceso de renombrar a las calles, avenidas y espacios públicos “es un paso fundamental para la formalización del Barrio Padre Carlos Mugica, por lo que resulta imprescindible dar nomenclatura a los espacios públicos, vías de circulación, centros deportivos y plazas”. Por otra parte, también se resalta la importancia de “identificar el dominio público y el dominio privado bajo el registro de los planos de fraccionamiento correspondientes, además de involucrar a los vecinos, referentes y organizaciones de la sociedad civil en el marco de un proceso participativo. Asimismo, la denominación de los espacios públicos evoca un hito significativo en la identidad, el valor simbólico y la transformación cultural del Barrio Padre Carlos Mugica”.
“Nombrar a las calles y espacios públicos evoca un hito significativo en la identidad, el valor simbólico y la transformación cultural del barrio Padre Carlos Mugica. Es un acontecimiento fundamental en la larga historia del barrio que se encuadra en el proceso de formalización, integración con el tejido urbano de la ciudad que junto a los vecinos del lugar venimos llevando adelante”, afirmó, por su parte, Diego Fernández, titular de la Secretaría de Integración Social y Urbana del Barrio.