Atrás quedaron los micros atestados de turistas y los incómodos double-deckers que Londres exportó al mundo. Ahora, la nueva tendencia en city tours es recorrer la ciudad corriendo, y aprovechar para hacer un poco de ejercicio mientras se conoce Buenos Aires.
Esta es la propuesta que Urban Running Tours acerca a los turistas de todo el mundo, que –de a cientos- llegan todas las semanas a Buenos Aires. La idea es recorrer San Telmo, Palermo, Recoleta o cualquiera de los circuitos que ofrece este nuevo emprendimiento de una manera bastante más activa y saludable que la tradicional.
“La idea surgió en enero de este año, estudiando el mercado turístico de las principales ciudades del mundo. El objetivo era crear un servicio de características únicas que nunca se hubiese ofrecido anteriormente en Buenos Aires”, contó Juan Ignacio Lapadula, director de Urban Running Tours.
En el país, el servicio se ofrece únicamente en Buenos Aires aunque los running tours o sightjoggings existen desde hace varios años en Roma, Berlín, Nueva York, San Diego, Chicago y otras ciudades de Estados Unidos.
El tour. Para participar de un running tour se requiere un cierto estado físico, ya que los recorridos son de aproximadamente 10 kilómetros. De todas maneras, los guías destacan que, como se trata de un servicio personalizado, el turista puede correr a su propio ritmo y ponen el acento en que el pasajero aproveche para conocer las virtudes y secretos de Buenos Aires.
“Recorrer la ciudad corriendo es una excelente opción para aquellos que quieren respetar el entrenamiento que realizan a diario en sus ciudades de origen y, al mismo tiempo, aprender sobre nuestra ciudad y conocer sus rincones más locales”, afirma Lapadula. La mayor demanda viene del segmento de hombres y mujeres de 30 a 55 años, la gran mayoría en viajes de negocios.
El running tour incluye todo lo necesario para una experiencia completa: transporte desde el hotel hasta el punto de inicio del recorrido (de ser necesario), agua para hidratarse mientras se corre y fotos que luego se le envían al turista por email.
El tour cuesta un total de 50 dólares por persona (aunque hay descuentos para grupos de dos o más), pero el servicio los vale: “Mis corridas por Palermo y San Telmo fueron muy divertidas, y un excelente comienzo de cada día.”, señaló Ann Marie, una turista que vino de Nueva York en viaje de negocios.
“El tour fue lo más destacado de mi viaje a Buenos Aires. Incluso para corredores casuales, esta una forma fantástica y única de ver una linda ciudad. Debes ir temprano por la mañana para ver como la ciudad se despierta”, dijo, por su parte, Bryan, de Texas.