Que los eSports se convirtieron en una de las industrias internacionales más importantes no es novedad. Basta con ver los torneos que se realizan en el mundo y los premios que reparten para comprobarlo. Sin ir más lejos, el mundial de Fortnite tuvo un pozo acumulado de 30 millones de dólares y en las competencias de fútbol FIFA el campeón de un solo torneo puede obtener 50 mil dólares o más en un fin de semana.
Si bien no todos los jugadores de videojuegos se dedican a ser profesionales, es evidente que cada vez hay más que ingresan en las plataformas cotidianamente. Y Argentina no es una excepción a la regla. Según un informe llevado a cabo por el estudio Kantar Ómnibus, en marzo de este año la mitad de la población menor a 24 años aseguró jugar en línea diariamente. La cifra se mantiene en las distintas zonas del país y agrega que alrededor del 20% también son espectadores cotidianos de videos, torneos o competencias que se transmiten por plataformas de streaming.
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La más popular de todas ellas es Twitch, fundada por Justin Kan en 2011, y las estadísticas, dadas por la propia compañía, la respaldan. En febrero del 2020 casi cuatro millones de transmisiones únicas fueron realizadas superando el promedio del 2019. Además, en el último cuatrimestre del año pasado registraron un total de más de dos mil millones de horas vistas por los usuarios registrados en la plataforma.
Volviendo a la Argentina, el informe señalado estima que 4 de cada 10 personas entre los 25 y 49 años afirman jugar videojuegos de forma habitual y que esa cifra desciende un 15% en el segmento superior a 50 años lo que, de todas formas, representa una cifra elevada para el país. “El contexto propio de confinamiento generó un incremento exponencial de los eventos deportivos virtuales, sumándose nuevos equipos, nuevas ligas, nuevas competencias, y un calendario virtual que nunca tuvo tanta acción”, señala Mariela Mayal, Media Director de la División Insights de Kantar Argentina.
Si bien la industria de eSports está más desarrollada en Estados Unidos, Europa y Asia, en Argentina se realizan esfuerzos diarios para mejorar el nivel. Un ejemplo es el estadio inaugurado en julio del 2019 en Tigre que está destinado especialmente para competencias. El mismo lleva el nombre de Esports Land y se convirtió en el más grande de Sudamérica con cinco mil locaciones para eventos y finales presenciales con público. DEVA (Asociación de deportes electrónicos y videojuegos de Argentina) certificó el espacio dándole carácter internacional.
Además, el país ya cuenta con jugadores profesionales en distintos videojuegos. Nicolás Villalba y Yago Fawaz compiten para equipos de fútbol europeos (FC Basel 1893 de Suiza y el West Ham de Inglaterra respectivamente) en los torneos de FIFA. Y también fueron los encargados de representar a Argentina en el mundial que se llevó a cabo el año pasado. Otro ejemplo es el de Thiago Lapp que con tan solo 13 años quedó quinto en la primera copa del mundo de Fortnite.
Ya sea a nivel profesional o amateur, los eSports crecen constantemente en el mundo y Argentina no es una excepción. En los próximos años es un sector a desarrollar tanto para generar más competidores como para fomentar la industria nacional y así lograr exportar contenidos propios.
CP
