La reapertura de los Museos Vaticanos dio a los visitantes la gran oportunidad de poder apreciar la famosa Capilla Sixtina sin grandes aglomeraciones de turistas.
Con el turismo afectado por la pandemia de coronavirus, la directora de los museos, Barbara Jatta, no cree que la cantidad de visitantes llegue a ser muy elevada. "Este es el momento ideal para venir", dijo en una conferencia de prensa previa a la apertura.
Jatta apuntó que otros museos que abrieron sus puertas en Roma algo antes tuvieron muy poca afluencia. Según contó, la Galleria Borghese, por ejemplo, sólo recibió a unos 100 visitantes en tres días.
La directora del museo también se refirió a que el 90 por ciento de los visitantes llegan desde el extranjero. Pero los viajes a Italia desde el exterior están actualmente restringidos. Se prevé que las fronteras reabran el mes que viene, pero no está del todo claro cuánta gente viajará.
En tiempos pre-pandemia, visitar los Museos del Vaticano solía significar largas filas, salones repletos y guardias gritándole a la gente que siguiera moviéndose para evitar aglomeraciones.
El número de visitantes aumentó de forma continua en los últimos años. En 2019 fueron 6,7 millones. La venta de entradas es una fuente importante de ingresos para la ciudad-Estado del Vaticano.
Como parte de las nuevas medidas de seguridad, los visitantes deben usar máscaras, mantener la distancia social y medirse la temperatura a la entrada de los museos. Los museos limitaron los grupos de visitas guiadas a 10 y obligan a los visitantes a reservar sus lugares para evitar aglomeraciones en el ingreso. El recargo de 4 euros (4,30 dólares) al ticket de 17 euros por la reserva fue eliminado.
Otros museos de Italia reabrieron recientemente o prevén hacerlo. También abrieron sus puertas las ruinas antiguas de Pompeya, mientras que el Coliseo romano también volvió a recibir visitantes a principios de mes.
HV / DS