La agencia espacial japonesa ha pospuesto el segundo vuelo de prueba de su nuevo cohete H3.
El lanzamiento se había programado para este jueves 15 de febrero, pero el pronóstico meteorológico obligó a reagendar la fecha. Este miércoles se anunciará el nuevo día.
Luego de un año del intento fallido de enviarlo al espacio, la agencia espacial japonesa busca evitar el riesgo de un nuevo fracaso.
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En un comunicado, Masashi Okada, director del proyecto H3 en la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) anunció que se preveían una tormenta eléctrica con fuertes vientos en el lugar donde se realizaría el lanzamiento: el Centro Espacial de Tanegashima que se encuentra situado al sur de Japón.
Esta será una prueba de fuego para Japón luego del fracaso del vuelo inaugural que ocurrió en marzo, en el cual un cohete tuvo que ser destruido mientras transportaba un satélite avanzado de observación terrestre, ALOS-3.
El errado lanzamiento terminó generando una creciente preocupación por los proyectos de exploración espacial de Japón. En ese contexto de frustración, una nave espacial diseñada por una empresa japonesa se estrelló durante un intento de alunizaje en abril, lo que terminó profundizando las dudas sobre la seguridad de la tecnología japonesa para poder explorar el universo.
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A partir de ahí, JAXA y su contratista principal, Mitsubishi Heavy Industries, han trabajado para solucionar y minimizar los problemas eléctricos que provocaron el fallo de ignición del motor durante la segunda etapa del cohete H3.
También han practicado meticulosamente para el próximo segundo vuelo de prueba. "Hemos tenido un año de turbulencias, pero hemos tomado todas las medidas posibles", declaró Okada.
Mayuki Niitsu, director del proyecto H3 en Mitsubishi, ha señalado la creciente necesidad de vehículos de lanzamiento estables para constelaciones de satélites.
"Esperamos lograr el éxito del segundo cohete H3 y mostrar nuestra capacidad a nuestros clientes potenciales", dijo y añadió que el H3 podría ser competitivo con los principales actores mundiales, como SpaceX.
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El objetivo principal de la misión Okada es colocar el cohete en la trayectoria prevista. Además, JAXA pretende instalar las cargas útiles del cohete en la órbita prevista.
Sin embargo, en este caso, el cohete H3 transportará un modelo del satélite ALOS conocido como VEP-4. La maqueta pesa 2,6 toneladas métricas, en lugar del satélite real.También llevará dos microsatélites de observación: uno desarrollado por Canon Electronics que puede captar imágenes fijas y en movimiento con procesamiento de alta velocidad, y otro, codesarrollado por Seiren y varias otras empresas y universidades.
El retraso en el desarrollo del motor causó más de dos años de demora en el lanzamiento del cohete H3. Con un coste de unos 220.000 millones de yenes (aproximadamente 1.500 millones de dólares), el H3 es la primera línea de cohetes nueva de Japón en más de dos décadas. Desarrollado conjuntamente por JAXA y Mitsubishi Heavy Industries, el H3 está diseñado para tener éxito y ser más asequible y competitivo que su predecesor, el cohete H-2A de marca registrada de JAXA, que se jubilará tras su 50º lanzamiento.
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El reciente logro histórico del aterrizaje de precisión de JAXA ha creado grandes expectativas, tras su lanzamiento con el cohete H-2A el mes pasado. Se espera que esto demuestre la competitividad de Japón frente a sus rivales, Estados Unidos y China
Con la mitad de costes de lanzamiento que el H-2A, el H3 posee la capacidad de transportar cargas útiles más pesadas y está equipado con un motor de hidrógeno de nuevo desarrollo.
SV / Gi
