La gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, es un engranaje vital entre quienes tratan de hacer frente a la violencia de algunos grupos de mapuches en el sur del país, y este sábado insistió en declaraciones radiales en señalar que el conflicto con esos sectores radicalicalizados "es serio, porque intentan socavar el orden constitucional", al tiempo que reclamó que intervenga la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) para priorizar "sobre todo la investigación".
Además, Carreras acusó a las autoridades del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas, Magdalena Odarda y Luis Pilquimán, de impulsar a estos sectores violentos, instigándolos a las ocupaciónes y en casos financiándolos, a través de diversos aportes: "Ha habido una gran complicidad y también instigación, porque buscan objetivos políticos que perjudican al normal funcionamiento de las instituciones".
Al respecto, la mandataria rionegrina enfatizó que "la presencia de Pilquimán en algunas de las tomas viene seguida de algún acto de violencia, hay un sostenimiento económico de estos grupos, traslado de personas", indicó.
"El gran debate creo que ha sido lograr que se comprenda la envergadura del problema para que podamos abordarlo antes de que sea un problema inabordable", sostuvo la gobernadora patagónica en "Sábado Tempranísimo", el tradicional ciclo de Marcelo Bonelli en Radio Mitre.
Carreras recordó que llevan "muchos años de hechos aislados, que venían ocurriendo fundamentalmente en objetivos federales, donde el accionar de los gobiernos de distinto signo político ha fluctuado entre un extremo de reprimir a otro extremo de dejar hacer o apoyar". Ante ello, la gobernadora sureña destacó que "hay una obligación conjunta" para actuar y evitó polemizar respecto al intercambio epistolar que mantuvo con el presidente Alberto Fernández: "Detrás de la carta llegaron fuerzas federales, así que yo tengo que centrarme en el interés de los rionegrinos más que en debates o cruces de palabras vanos. Me tengo que centrar en las soluciones".
"Pedimos fuerzas federales y sobre todo la investigación: el Gobierno nacional es quien cuenta con los servicios de Inteligencia. Estamos pidiendo un accionar conjunto. No es un problema étnico, sino delictivo", remarcó.
En ese sentido, indicó que se trata de "delitos de orden federal que han sido reconocidos así por la Fiscalía federal, que tienen una larga data y exceden los límites de la jurisdicción de Río Negro".
La sureña afirmó que estos grupos mapuches "subvierten el orden, buscan que los gobiernos tengan determinadas actitudes y lo buscan a través de la violencia, atacan la integridad física de las personas y los bienes".
"Hay un grupo que intenta socavar el orden constitucional, institucional y lo hacen trascendiendo las fronteras provinciales e incluso nacionales. El problema es serio", añadió.
Además, Carreras acusó a las autoridades del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas, Magdalena Odarda y Luis Pilquimán, de impulsar a estos sectores: "Ha habido una gran complicidad y hay instigación también porque buscan objetivos políticos que perjudican al normal funcionamiento de las instituciones". "La presencia de Pilquimán en algunas de las tomas viene seguido de algún acto de violencia, hay un sostenimiento económico de estos grupos, traslado de personas", indicó.
Finalmente, la gobernadora rionegrina destacó que tiene "expectativa" de que la Justicia "se comprometa con la investigación" de los ataques incendiarios perpetrados por grupos mapuches.
RB/HB