La lenta llegada de vacunas al país hizo que en las últimas horas avance en la Justicia federal una denuncia contra el presidente Alberto Fernández, el ex ministro de Salud Ginés González García y la actual titular de esa cartera, Carla Vizzotti, pidiendo que se investiguen las razones y las eventuales responsabilidades en las demoras de las dosis compradas a AstraZeneca, la empresa británica que desarrolló la vacuna junto a investigadores de la Universidad de Oxford.
Como se sabe, los millones de dosis que debían llegar de esa firma desde enero nunca se entregaron, complicando el proceso de vacunación y obligando a negociar de urgencia con otros proveedores de India, China, e insistiendo en las gestiones en Rusia por más Sputnik V.
La producción local del principio activo de la vacuna de AstraZeneca-Oxford, pensada para cubrir la demanda latinoamericana, se hace en mAbxience, el laboratorio de Hugo Sigman en Garín, pero los envíos a México para que las dosis se completen y envasen ha tenido en el país azteca problemas un cuello de botella que se mantiene y demoró sensiblemente la llegada de vacunas de AstraZeneza a la Argentina. Y en cuadro como el actual, la falta de esas dosis provocó que el plan de vacunación previsto quedara todavía más comprometido.
En ese cuadro, esta semana vacunas Josefina de Elizalde, en representación de un espacio llamado "Acción Conjunta Republicana", presentó una denuncia que quedó a cargo del juez federal Julián Ercolini y el fiscal Guillermo Marijuan, en la que piden que se investigue si Alberto Fernández, el ya renunciado Ginés González García y su reemplazante Vizzotti, incurrieron en "malversación de caudales públicos e incumplimiento de los deberes de funcionarios públicos" en el contrato entre el Estado y AstraZeneca por vacunas que todavía no llegaron.
Asi trascendió que se pidieron documentos al Ministerio de Salud y fuentes de mAbxien admitieron también que la Justicia reclamó documentación a ese laboratorio sobre el rol cumplido en torno al contrato entre el Gobierno y AstraZeneca, aunque desde Garín se señaló que "Sigman no está imputado, sino que se lo nombra en una parte de la causa". Y sobre la denuncia de malversación de fondos públicos, voceros cercanos al empresario recalcaron que "ni Hugo Sigman ni mAbxience recibieron fondos públicos, sino que el contrato es del Estado Argentino con AstraZeneca".
"Esa aclaración es muy importante, porque se habla del contrato de Sigman con el Estado, y él es solamente el proveedor de un insumo a AstraZeneca", señalaron fuentes cercanas al empresario farmacéutico.
Sigman había señalado esta semana que "todos los países experimentan retrasos" en la provisión de vacunas, pero aseguró en redes sociales que "en momentos en que la segunda ola de Covid se cobra más y más muertos, con muchas familias perdiendo a sus seres queridos y el sistema de salud muy estresado, la intoxicación de noticias falsas sólo contribuye a generar más dolor".
"El equipo científico y técnico de mAbxience, que se encarga de producir el principio activo de la vacuna de AstraZeneca, trabaja contrarreloj desde noviembre del 2020, con un profundo compromiso, para lograr los objetivos acordados. Para ello fue necesario un gran esfuerzo del que estamos orgullosos, porque mAbxience ha cumplido con los objetivos y así lo seguirá haciendo", indicó Sigman, insistiendo en que su parte del trabajo en el engranaje de producción montado por AstraZeneca se cumplió "tanto en tiempo como en cantidad".
Sigman repitió que "mAbxience no es la propietaria de la vacuna, ni la encargada de venderla, cobrarla, ni de firmar los contratos con los gobiernos o establecer las fechas de entrega. Solo ha sido seleccionada, en un reconocimiento al capital humano y científico argentino, para producir el principio activo, como parte de un proyecto que tiene como objetivo abastecer de la vacuna a precios accesibles a los países de nuestra región".