Axel Rojas habría sido reconocido por usar las mismas zapatillas que las del día en el que ocurrió el brutal asesinato.
Detuvieron al segundo sospechoso del crimen de Umma |
NA
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, confirmó que se detuvo al segundo sospechoso por el crimen de Uma, la hija de 9 años de uno de sus custodios perteneciente a la Policía Federal (PFA).
Fuentes policiales le confirmaron a Noticias Argentinas que se trata de Axel Rojas, que fue detenido en San Pedro y sería indagado mañana por el fiscal Pablo Rossi.
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"Axel Emiliano Rojas, criminal de niños. No hay consuelo, al menos habrá justicia. Trabajamos junto a la Provincia para buscar los que faltan. El que las hace las paga", publicó la funcionaria.
Aparentemente, un vecino fue el que dio aviso a la policía tras identificar las zapatillas que llevaba puestas el joven de 20 años.
Vale recordar que es el segundo detenido. Días antes había caído Patricio Valentín García, un joven de 22 años que fue el primero en ser encontrado tras el violento crimen ocurrido el lunes a la mañana en Lomas de Zamora. Durante su indagatoria frente al fiscal se negó a declarar y subrayó que presentará pruebas que ratifican su inocencia.
Al nuevo detenido se lo conoce como "pelusa" y también fue identificado gracias al registro de las cámaras de seguridad. La Policía realizó varios allanamientos hasta que finalmente logró dar con su paradero y detenerlo.
Todavía hay dos prófugos
Por el caso todavía hay dos cómplices que permanecen prófugos de la Justicia. Son Miguel Pastor Romero Molinas, de 21 años, y otro conocido como "Barrita" o "Baltazar", de quien aún no trascendió la identidad. "Estamos trabajando en ubicar y detener a los autores", dijo el fiscal Rossi, al canal TN.
En los últimos días, hubo allanamientos en Villa Fiorito, partido de Lomas de Zamora, y La Cava, en San Isidro.
Umma fue baleada el lunes 22 de enero a las 8.48 de la mañana cuando se encontraba en la parte trasera de un Ford Ka en el que iban su papá, el efectivo de la Policía Federal (PFA) Eduardo Aguilera, y su mamá María Rodríguez Álvarez, personal de la Superintendencia de División de Rastros de la PFA.
El coche de los efectivos estaba sobre la vereda cuando un Toyota Corolla negro le interrumpió el paso y dos delincuentes bajaron armados con intenciones de robo. Aguilera aceleró con intenciones de huir, y los asaltantes dispararon hacia la parte trasera del vehículo.
Umma recibió un disparo en la nuca y otro en una de sus manos. Primero la llevaron de urgencia hasta el hospital Gandulfo y luego la derivaron en helicóptero al hospital Churruca, donde permaneció internada con pronóstico reservado hasta que finalmente falleció.
