Daniel Arroyo participó de una conferencia de prensa virtual organizada por estudiantes del Posgrado en Periodismo de Investigación del Grupo Perfil y la Universidad del Salvador (USAL), en la que destacó la ayuda social implementa por el Gobierno para que los sectores más vulnerables hagan frente a la pandemia, a la vez que reconoció la difícil situación que atraviesa un alto sector de la población. “Tenemos diez millones de personas que reciben asistencia alimentaria, ya hace cuatro meses que aún con más actividad económica, no baja la cantidad de gente en los comedores”, sostuvo.
El ministro de Desarrollo Social se mostró dispuesto a ser candidato del Frente de Todos en las próximas elecciones, a la vez que destacó las figuras de Facundo Manes y María Eugenia Vidal en la oposición pero cuestionó al expresidente de Juntos por el Cambio. “A mi me impacta la declaración que hizo Mauricio Macri sobre el coronavirus como una gripe un poco más aguda, a mi modo de ver a Macri no le duele el dolor del otro”, aseguró Arroyo en el Ciclo de Entrevistas a cargo de Rodrigo Lloret, director de Perfil Educación.
—La pobreza sigue aumentando por el impacto de la pandemia. ¿El Gobierno implementará un nuevo IFE para ayudar a los sectores más vulnerables?
—Estamos tomando todas las medidas necesarias en un contexto de segunda ola de coronavirus. Primero, tuvimos un bono de 15.000 pesos, para quienes tienen la AUH en el AMBA. Luego, estuvo el Repro 2, que es el pago del salario para parte de la gente del sector privado, que ahora es de 22.000 pesos. Esa ayuda llegó también a los pequeños emprendedores. Y subimos lo que tiene que ver con la Tarjeta Alimentar, para los chicos de hasta 14 años para llegar a los cuatro millones de chicos. También hay un nuevo bono de 6.000 pesos para personas que tienen el Programa Potenciar Trabajo. Y se anunció un nuevo aumento del salario mínimo. Esto es lo que hemos hecho hasta ahora, estamos evaluando permanentemente la situación, si es necesario vamos a tomar medidas adicionales. El IFE tuvo que ver con un momento muy específico, con el cierre total de las actividades económicas en abril, mayo, junio. No está descartada ninguna medida, evaluamos, permanentemente. Yo evalúo cinco sectores: el textil, la construcción, la producción de alimentos, el cuidado de personas y el reciclado. La verdad que esos cinco sectores se están moviendo un poco más, hay algo de mejora económica. Y también evaluamos la cantidad de contagios en el conjunto del país. Pero no descartamos ninguna medida, que tenga que ver con la asistencia alimentaria y con poner plata en el bolsillo de los argentinos.
—Dijo que el IFE tuvo que ver con un momento específico y enumeró todas las medidas que se fueron tomando hasta el momento. ¿El Gobierno considera que no es necesario implementar un nuevo IFE?
—Mucho depende realmente el nivel de actividad económica y de la evolución de la segunda ola de coronavirus. El nivel de actividad económica está mejorando, hoy hay más actividad. Está mejorando un poco la situación social. Y el nivel de contagios se ha sostenido y ha bajado un poco, hoy es esa situación. Hoy hay más apertura económica y se ha reactivado, sobre todo, el sistema de construcción y el textil. El problema que tenemos es el precio de los alimentos: tenemos diez millones de personas que reciben asistencia alimentaria, ya hace cuatro meses que aún con más actividad económica, no baja la cantidad de gente en los comedores. La gente hace changas pero va también al comedor, para estirar, para llegar a fin de mes. O sea, que aun con más actividad económica, se mantienen diez millones de personas en los comedores y en los merenderos. Pero, hasta hace solo unos meses yo veía solo angustia y ahora veo angustia y esperanza. Angustia, porque muchas veces vemos gente que la pasa mal de verdad. Es muy impactante la situación, no solo económica, sino también sanitaria. Pero también vemos gente que se ha recompuesto, que está laburando
—¿Cuál es e balance que hace de la implementación del IFE?
—El IFE llegó a nueve millones de personas: tres millones volvieron al trabajo y están en la situación prepandemia, otras tres millones van camino a hacerlo, y hay tres millones con muchos problemas, porque se quedaron sin trabajo, porque es un jardinero que tenía diezcasas y ahora tiene cinco, o es una empleada doméstica que tenía un número de horas que no pudo recuperar. Me parece que además hay que dar un debate para el largo plazo, de la política social y yo creo que hay que ir a un ingreso universal de base en la Argentina. El ingreso universal es algo que lo creo yo, pero también lo dice la Cepal, lo dice Naciones Unidas. Es algo que están haciendo en Alemania, España o Israel, y es el debate que tenemos que dar en América Latina. Yo he escrito sobre el tema hace ya mucho tiempo. Es el debate que tenemos los ministros cuando nos reunimos, de manera virtual en estos momentos. Los ministros de América Latina, discutimos este esquema, está claro que no hay condiciones fiscales para hacerlo, pero es un debate para adelante. Aclarando que, siempre cualquier tipo de mecanismo, de apoyo económico de parte del Estado, tiene que tener contraprestación laboral.
—¿Qué pasará con las personas que no tienen acceso a la Tarjeta Alimentar y viven en situación de pobreza extrema?
—La Tarjeta Alimentar era para chicos de hasta 6 años, pasó a ser para chicos de hasta 14 años, hemos ampliado y llegamos a 4 millones de chicos, y ahora tiene tres montos: 6.000 pesos, para la madre que tiene un chico de hasta 14 años; 9.000 mil pesos para el que tiene dos hijos; y 12.000 para los que tienen tres o más chicos. Esa fue la ampliación de la Tarjeta Alimentar. Ampliamos también el Programa Potenciar Trabajo, que llega ahora a un millón de personas, que cobran el 50% del salario mínimo. Esto se está actualizando, hacemos convenios con las cámaras empresariales, para que las personas se capaciten 25 horas semanales en las empresas o por su propia cuenta, como emprendedores o como estudiantes.
—¿Los 4.300 millones de dólares que va a girar el FMI al país, deberían ser usados para pagar la deuda o para ayuda social?
—Eso lo define el equipo económico y tiene que ver con un conjunto de decisiones macroeconómicas. La verdad es que yo no participo de esas definiciones. En toda la negociación con el Fondo Monetario, yo participo en una parte, que es que el Programa Potenciar Trabajo sobre las condicionalidades y la evaluación que se hace. Y, en todo momento, he planteado la necesidad de ampliar el apoyo social en este programa. Pero la definición sobre esos fondos adicionales, que está generando el FMI para el conjunto de los países, en el marco de la pandemia y la reutilización, es una definición del equipo económico del Presidente.
—No participa de las decisiones económicas pero es el responsable de Desarrollo Social. ¿Usted cree que esos fondos deberían destinarse a los sectores más afectados por la pandemia?
—Nosotros estamos generando mecanismos de distintos planos para reforzar el presupuesto, en materia social. Para ser claro, yo el año pasado tripliqué el presupuesto: arranqué con 84 mil millones de pesos y terminé con 240 mil millones de pesos. Y este año ya estoy sobre ejecutado. La Tarjeta Alimentar no estaba presupuestada para la ampliación hasta 14 años, y se hizo. También ampliamos el Programa Potenciar. De qué manera se utiliza cada fondo y para qué asignación va presupuestada, la verdad, es algo que desconozco. Sí, claramente, ha habido una ampliación presupuestaria importante para el Ministerio de Desarrollo Social el año pasado y, realmente, muy importante este año.
—Algunos analistas notan cierto agotamiento en Alberto Fernández. ¿Usted cómo ve al Presidente?
—Yo lo veo muy activo. Lo veo muy metido en la gestión. Gobernar en pandemia es cómo manejar en la neblina: muy complejo. El Presidente no solo está muy metido en los temas, sino que tiene mucha claridad, piensa en empezar por los últimos, avanzar con la vacunación. Es una gestión fuerte. Nosotros hablamos permanentemente. Estamos encarando una gestión muy linda en un contexto muy difícil. En los vacunostorios uno puede ver cuánta gente sale contenta. La situación va avanzando, lentamente va mejorando. Hay mucha presencia del Estado, con dificultades, pero mucha presencia.
—¿Va a ser candidato en las próximas elecciones?
—No lo sé, el Frente de Todos define las candidaturas, yo estoy muy metido en la gestión de la política social y del Ministerio. No soy cuentapropista de la política. No es que hago lo que me parece, definirán el Presidente y la vicepresidenta las candidaturas y yo voy a acompañar lo que se decida.
—¿Cómo ve la candidatura de Facundo Manes en la provincia de Buenos Aires?
—Me parece muy bien, insto permanentemente que la gente participe en la actividad política, hay periodistas que hoy están pensando en la actividad política, me parece realmente muy bien. En el caso particular de Facundo Manes lo conozco, ha venido con su familia a comer a mi casa, he ido a comer a la suya, tengo respeto por él. Más allá de si a mí me parece bien el espacio político en el que está o no, todo aquel que viene desde otro ámbito y decide participar activamente de la política, yo lo veo muy bien. Veo muy bien lo de Facundo Manes como de otras personas que hoy se están lanzando a la arena política, digo del ámbito periodístico o desde otro lugar.
—¿Qué piensa de María Eugenia Vidal como candidata en la Ciudad de Buenos Aires?
—Tengo respeto por María Eugenia Vidal, para empezar la conozco hace muchísimos años, no tengo idea cómo le irá o no en la Ciudad de Buenos Aires, pero sí tengo respeto personal por ella. La conozco y me queda claro que es una persona que, apasionadamente, le dedica mucho a la política y tiene una mirada social sobre la política que yo creo que es positiva.
—¿El Gobierno podrá ganar las elecciones, a pesar de las complicaciones generadas por la pandemia?
—Yo creo que nos va a ir bien electoralmente, me parece que la sociedad distingue los que trabajan de los que hablan, nos ven trabajando, con aciertos y con errores, pero nos ven trabajar. Hay conciencia de un Gobierno que ha puesto el cuerpo y que ha trabajado en un contexto tan difícil. Mi opinión es que la sociedad va a votar a aquellos que vio trabajar en el tiempo.
—Según usted, el Gobierno es el que trabaja. ¿Quiénes son los que hablan?
—A mi me impacta la declaración que hizo Mauricio Macri sobre el coronavirus como una gripe un poco más aguda, a mi modo de ver a Macri no le duele el dolor del otro. Yo creo que sólo puede hacer política el que le duele el dolor del otro, cualquiera que camine tres metros en cualquier barrio, que ande, que escuche, que vea, se da cuenta que la situación sanitaria es complicada. Todos conocemos gente que tuvo coronavirus y volvió a tener coronavirus, en todas las familias hay situaciones muy críticas, por lo que me parece que en el caso de Macri no le duele el dolor del otro porque entonces vería la angustia, la dificultad.
—Agradecemos su participación en el Ciclo de Entrevistas de Perfil Educación y lo invitamos a cerrar el reportaje con un comentario final quiera realizar.
—Muchas gracias y agradezco la posibilidad de participar verdaderamente de este Ciclo de Entrevista. Me gustaría decirles que todas las políticas que llevamos adelante tienen que ver con la intención de mejorar la asistencia alimentaria y con reforzar el bolsillo de los argentinos. Podemos tener dificultades o limitaciones, pero todo va en esa dirección.
Por Liliana Zacaríaz, Sabrina Chemen y Deborah Pastrana
Estudiantes de Periodismo de Perfil Educación
Posgrado en Periodismo de Investigación Perfil-USAL