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POR CRÍMENES EN LA DICTADURA ARGENTINA

La justicia alemana avanza contra Luis Kyburg, exrepresor prófugo en Berlín y que Argentina reclama

Se tata de un ex oficial naval sobre quién pesan órdenes de arresto nacional e internacional desde 2012 por crímenes de lesa humanidad. Las autoridades de Berlín allanaron su vivienda.

Luis Kyburg
Luis Kyburg | BILD

Los funcionarios de la Oficina Federal de Policía Criminal y de la fiscalía de Berlín allanaron este martes 31 de enero la vivienda en Berlín del exoficial naval argentino-alemán Luis Esteban Kbyburg, acusado de secuestrar, torturar y asesinar durante la última dictadura militar argentina.

El allanamiento en el barrio de Prenzlauer Berg tuvo como objetivo encontrar "documentos, archivos y dispositivos de transmisión de datos, que arrojen luz sobre el papel de los acusados en relación con la 'desaparición forzada' de miembros de la oposición y su presunto asesinato", dijo la fiscalía.

El ex teniente de navío Kyburg, ahora de 75 años, ha estado bajo investigación durante varios años en Alemania y Argentina. Pero los funcionarios alemanes rechazaron la demanda de extradición hecha por el gobierno argentino porque él también es ciudadano alemán y, por lo tanto, no puede ser juzgado en otro país.

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Para 2012, cuando la Justicia argentina pidió su captura nacional e internacional, con una recompensa que primero fue de 100 mil pesos y luego ascendió a 500 mil, Kyburg ya se había convertido en ciudadano alemán y gozaba en primer lugar del anonimato.

En 2013, el exoficial fue imputado en la denominada causa de la Base Naval Mar del Plata, acusado de participar en los escuadrones de la muerte que operaron, pero decidió trasladarse a Alemania para eludir el requerimiento de la Justicia, que libró en su contra un pedido de extradición en marzo de 2015. 

Kyburg está acusado de atacar al menos a 15 hombres y mujeres jóvenes en 1976 y 1977, cuando era el segundo al mando de una unidad de buzos en una base naval argentina, dijeron los fiscales de Berlín en un comunicado. 

Luis Kyburg
El gobierno argentino impuso una recompensa de $5 millones por Kyburg.

La unidad de élite de buzos de Kyburg, "Agrupación Buzos Tácticos UT 612", de la que era segundo comandante, desempeñó un papel clave en atacar a los denominados "subversivos", que después de ser torturados, podían ser drogados y arrojados desde aviones al Río de la Plata.

Además actuó como jefe del Departamento Personal, Operaciones y Logística de la Armada Argentina, la unidad desde la cual se planificaron los secuestros y asesinatos de 152 personas que se perpetraron en la ciudad de la costa atlántica entre 1976 y 1983, además de apropiaciones de bebés.

"Era la responsable de secuestrar, mantener en cautiverio, torturar y muchas veces ejecutar con cualquiera de los sistemas que utilizó la armada argentina, como fusilamientos que después presentaban como falsos enfrentamientos", explicó el abogado en derechos humanos César Sivo.

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Y agregó: "En algunos casos arrojaban al mar a las víctimas vivas, las dormían y las ataban. No sabemos cuáles fueron métodos que utilizó Kyburg o si utilizó todos esos métodos, pero él, como segundo comandante de la Agrupación de Buzos Tácticos, era quien coordinaba junto al comandante, que era Rafael Guiñazú todos estos operativos ilegales de secuestro, cautiverio, tortura y muerte".

Varios efectivos que se desempeñaban como buzos tácticos de la Armada durante la última dictadura cívico militar fueron condenados en 2016 en el juicio oral y público de las causas Base Naval 3 y 4, pero el exmarino no estuvo sentado en el banquillo de los acusados.

En 2017, el periodista argentino Toni Hervida localizó a Kyburg en el antiguo Berlín Oriental, en el barrio de Prenzlauer Berg, una zona plagada de edificios restaurados que aún conservan un dejo del estilo arquitectónico de la era socialista. 

"Hay un torturador caminando por Berlín", titulaba una nota publicada en julio de 2020 por el diario alemán Bild, que mostraba al exmarino con barba caminando. "Aquí estoy, espero responder ante un Tribunal en Alemania, no en Argentina. Soy inocente", le dijo al periodista.

El gobierno argentino impuso una recompensa de $5 millones por Kyburg.

ds