Tara Reade (56), exmiembro de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, aprovechó la jura del presidente Joe Biden para reiterar su acusación de abuso sexual hace 27 años a la vez que condenó a los integrantes del Partido Demócrata de ser “cómplices de su conducta".
Reade dijo que fue “excepcionalmente difícil” ver a Biden llevar a cabo el juramento de su cargo, el miércoles 20 de enero, luego del episodio del que dice ser víctima.
“Realmente no puedo describir el sentimiento, excepto que sigo queriendo despertar de una pesadilla" lamentaba la exsenadora. Acto seguido, condenó: “El Partido Demócrata sigue siendo cómplice de conducta sexual inapropiada. Solo lo sacaría a la luz cuando sea un republicano o alguien más".
El caso de abuso sexual de Tara Reade
En marzo del año pasado, Reade aseguró que en el transcurso del año 1993, cuando Biden se desempeñaba como senador en Delaware, fue agredida sexualmente. En el marco de dicha declaración, otras mujeres también acusaron al presidente electo por "tocamientos inapropiados".
Según los dichos de la exsenadora ante el Daily Caller, el olvidable suceso tuvo lugar el sótano de un edificio de oficinas del Capitolio durante la primavera de aquel año. Estando allí, habría sentido la manos del mandatario por debajo de su falda.
“Hablar de haber sido acosado y agredido sexualmente en 1993 cuando yo era el miembro del personal de Joe Biden fue insoportable en muchos niveles '', reconoció Reade además de aclarar que Biden "usó su poder y recursos con ciertos medios para borrarla y silenciarla".
Reade afirmó también que, en anteriores ocasiones, el actual presidente había elogiado sus piernas. Asimismo, también se quejó de haber sentido las manos de Biden sobre sus hombros, cuello y cabello.
“Me solidarizo con todos los supervivientes que se enfrentan a tal poder. No voy a ser silenciada. En lugar de hablar de salvar el alma del país, debería rendir cuentas por sus acciones”, concluyó. Biden y su equipo han negado constantemente sus afirmaciones.
JFG / DS