En un largo hilo de Twitter, el auditor general de la Nación Miguel Ángel Pichetto rechazó en forma tajante la construcción de un puerto chino en Tierra del Fuego, a través de la firma de un presunto acuerdo que impulsa el gobernador Gustavo Melella con la empresa estatal china Shaanxi Chemical Industry Group. Otros dirigentes opositores ya se habían manifestado en el mismo sentido, pidiéndole al Gobierno nacional que "detenga esta locura".
"Ante la posibilidad de construcción de un puerto en Tierra del Fuego favorable a intereses chinos y de ciertos empresarios argentinos, es preocupante la ligereza con la que el gobernador Melella maneja el asunto y el aval del gobierno nacional", agregó Pichetto, considerando que "la construcción de este puerto nos introduce en un grave conflicto geopolítico y afecta nuestros intereses nacionales, no podemos permitir que la avaricia de empresarios privilegiados en Tierra del Fuego nos lleve a un escenario de complejidad en el Atlántico Sur".
Para Pichetto, ese nueva enclave chino en el sur del país, vale recordar que ya funciona una misteriosa base china en la Patagonia es un problema de Estado y por eso señaló que "no podemos permitir que la avaricia de empresarios privilegiados en Tierra del Fuego nos lleve a un escenario de complejidad en el Atlántico Sur".
"Si se consolida la presencia china en el sur argentino como apostadero y astillero de barcos con proyección en la Antártida, se afecta la soberanía y proyección argentina sobre dicho continente", precisó Pichetto, destacando que ese puerto "también representa una amenaza para nuestra relación con los Estados Unidos".
El gobernador Melella admitió haber firmado el memorándum con la empresa estatal china, pero rechazó que eso "implique la existencia de una base naval china en la zona". El acuerdo de Melella con la Shaanxi Chemical Industry Group prevé la posibilidad de una inversión de 1.250 millones de dólares en un polo petroquímico, y está ahora bajo la lupa de Legislatura fueguina.
Según Melella, el acuerdo con los chinos incluye la instalación de una planta para producir 600.000 toneladas de amoníaco sintético, 900.000 toneladas de urea y 100.000 de glifosato anuales.
Los controles de precios
En su hilo de tuits, PIchetto también se refirió a la cuestión de los controles de precios que impulsa el presidente Alberto Fernández, y afirmó que "lo único que le falta al Gobierno es aplicar la ley de abastecimiento y darle a los sindicalistas y movimientos sociales, camisas rojas como la guardia bolivariana chavista".
"Es muy riesgoso lo que hace el gobierno de darle el poder a un sindicato y a movimientos sociales para el control de precios. Eso inaugura un poder paraestatal y es uno de los hechos más graves en la historia de la democracia", precisó Pichetto, reclamando que "el presidente y el ministro de Economía le pidan la renuncia al secretario de Comercio (Matías Tombolini), haciendo cesar toda intervención" en la cadena de precios.
NA/HB
