Quién es Rex Heuermann, el acusado de asesinar a varias mujeres que Alec Baldwin comparó con Milei
El actor estadounidense comparó la apariencia del ganador de las PASO con un acusado de asesino en serie. El arquitecto de 59 años está detenido por tres crímenes, pero sospechan que podrían ser muchos más.
Alec Baldwin comparó físicamente a Milei con un acusado de asesino serial. |
Télam
Rex Heuermann, de 59 años, está acusado de matar a tres mujeres -Megan Waterman, de 22 años; Melissa Barthelemy, de 24; y Amber Lynn Costello, de 27-, cuyos cuerpos fueron descubiertos cerca de Gilgo Beach en Long Island en diciembre de 2010. Los asesinatos fueron el tema de la película de Netflix de 2020 "Lost Girls".
Luego, tras varios comentarios en la publicación, Baldwin decidió aclarar que no tiene nada que ver con un comentario político y solo fue un parecido estético. "Post data: Realmente, esto no tiene nada que ver con política. Yo solo pienso que el parecido es notable", señaló.
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El posteo de Alec Baldwin sobre el parecido físico entre Milei y un acusado de asesino en serie.
Los macabros crímenes por los que se lo acusa a Rex Heuermann
Los cuerpos de las tres mujeres habían sido atados con cinturones o cinta roja y envueltos en arpillera.
Además, se lo considera el principal sospechoso del asesinato de Maureen Brainard-Barnes, de 25 años, cuyos restos también se localizaron cerca de Gilgo Beach.
Los fiscales también están tratando de establecer la participación de Heuermann en las muertes inexplicables de hasta dos docenas de personas cuyos cuerpos fueron encontrados en la playa de Long Island desde 1996.
Una ex trabajadora sexual, Nicole Brass, afirmó que tuvo una cita con el presunto asesino, pero se alejó cuando se sintió incómoda. Dijo que conoció a Heuermann en un restaurante de Port Jefferson (Long Island) en algún momento entre 2014 y 2016 y que la conversación se centró en documentales sobre crímenes reales.
Heuermann, casado y con dos hijos, es un arquitecto de 59 años. Ahora está acusado de ser asesino en serie.
Heuermann, casado y con dos hijos, es un arquitecto de 59 años dueño de una compañía de construcción con sede en Manhattan que, según su sitio web, realiza trabajos en comercios y otras renovaciones para importantes minoristas, oficinas y apartamentos.
Según la policía, Heuermann continuó con su "actividad perturbadora" durante años hasta su detención: "Es alguien que todavía estaba involucrado en actividades que eran perturbadoras, ya sea en sus búsquedas en Internet, ya sea participando en otras actividades en las que no debería participar".
En documentos presentados ante un tribunal los investigadores de los asesinatos de la playa vincularon un automóvil Chevrolet con el asesinato de Costello después de que un testigo lo viera en esa zona. A partir de ahí, la policía pudo vincular ese automóvil con los registros del teléfono celular de Heuermann.
Los policías dicen que Heuermann usó el teléfono de Melissa Barthelemy para hacer llamadas burlonas a su familia desde el teléfono de la víctima, llamadas que se hicieron cerca de su elegante oficina en Manhattan.
Tras la identificación de Heuermann como propietario del Chevrolet, la policía emitió más de 300 citaciones, órdenes de allanamiento y otros procesos legales para obtener más pruebas.
Rex Heuermann.
Heuermann finalmente fue vinculado a uno de los asesinatos a través de un perfil de ADN mitocondrial de una corteza de pizza y una servilleta usada que descartó de su oficina en Midtown Manhattan. Fue detenido por la policía el 13 de julio y permaneció en la cárcel antes de su juicio bajo custodia por temores a que se suicide.
El arquitecto vivía en una casa "parecida a una mazmorra" en Massapequa Park, muy cerca de la playa, con su esposa Asa Ellerup. La policía dijo que el allanamiento de la vivienda fue muy "fructífero" en términos de evidencia y que se hallaron más de 250 armas de la residencia y una gran cámara acorazada en el sótano.
Según la prensa estadounidense, Heuermann "se puso nervioso" cuando una diseñadora de interiores encargado de medir su casa trató de entrar, diciéndole que estaba llena de armas. "No entendía por qué estaba siendo tan raro al respecto, y ahora estoy pensando '¿Qué estaba escondiendo?", dijo ella.
Su esposa solicitó el divorcio días después de su arresto y todavía no visitó a su esposo. La mujer viajaba a Islandia, su país natal, durante dos semanas cada año, lo que podría haberle dado al arquitecto la oportunidad de cometer los atroces crímenes.
