La expulsión de Walter "Alfa" Santiago de la casa de Gran Hermano tomó ribetes políticos luego de que la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, lo celebrara en redes sociales. El ahora ex participante, además, se refirió a los fuegos artificiales que se escucharon a su salida y se lo achacó a "los peronchos".
El polémico jugador que antes de cruzar la puerta hacia el aislamiento se definió como "calentón, memorioso y rencoroso" volvió a quedar en el medio de la polarización que atraviesa la política argentina. No sólo porque perdió la batalla de votos contra la ex diputada peronista Romina Uhrig, sino también por sus comentarios a minutos de abandonar la casa.
Afuera, sin embargo, su expulsión con el 52,83% de los votos fue celebrada por Moreau, quien posteó: "Gamer Over Machirulo". La política, nuevamente, alimentaba al reality más famoso del país. "La presidenta de la cámara, en lo importante", le respondió a la diputada un usuario. "De laburar ni hablamos, no?", le espetó otro twittero. Otra usuaria publicó una foto de Cristina Fernández de Kirchner que sentenciaba: "Somos rudas las peronistas".
Mientras tanto, Santiago se despedía de la casa con un tono despectivo hacia el peronismo. "Los perucas", dijo primero mientras tronaban fuegos artificiales por una protesta salarial de trabajadores de SATSAID contra Telefe. "Los peronchos son", agregó. En su cabeza, imaginaba una celebración partidaria en favor de Uhrig.
Como si de un círculo se tratara, "Alfa" se fue hablando del peronismo y tomó repercusión durante los primeros días de convivencia por hablar de dirigentes del movimiento. "Alberto Fernández a mí me coimeó un montón de veces", llegó a decir el hombre de las bandanas en octubre del 2022.
El tema rápidamente rebotó en los medios y las redes sociales, a punto tal que Gabriel Cerruti debió pedir al canal que el participante se retracte por su "actitud agraviante". Esto no solo no sucedió, sino que la discusión logró tomar más vuelo, según demostró un informe que analizó su alcance digital. Al Gobierno Nacional no le salió ni el tiro del final.
Alfa vs Romina o la polarización ideológica
Los comentarios de Alfa en contra del peronismo tienen asidero en sus redes sociales. Allí, con un breve repaso de su vida pública, se lo puede ver en fotos junto a Mauricio Macri o el empresario Cristiano Ratazzi, reconocido seguidor del PRO que hoy vive en Uruguay. Junto al ex presidente se fotografió en 2017 en el búnker de Cambiemos.
La animosidad contra el peronismo entra en una nebulosa cuando se lo ve junto al ex presidente Carlos Menem o su hija Zulemita. Sin embargo, en otras publicaciones se muestra furioso contra Alberto Fernández o Cristina Fernández de Kirchner. Peronismo selectivo.
La trayectoria de Romina Uhrig es más conocida: fue diputada nacional, ex pareja de quien fuera intendente de Moreno, Walter Festa, y trabajó en el gobierno de Axel Kicillof.
PERFIL develó la semana pasada que la participante de GH había sido protagonista de un escándalo cuando comenzó a trabajar con Festa: Uhrig era pareja del primo del entonces mandatario pero luego decidió dejarlo por él.
Peor fue su desempeño como congresista, donde emitió 104 palabras en dos años y no presentó ningún proyecto de acuerdo al Índice de Calidad Legislativa que realiza el medio especializado Parlamentario.
Con todo, en la noche del domingo 12 de febrero la filiación política de Santiago y Uhrig volvió a florecer explotando en redes sociales pero sobre todo, dejando claro que la grieta ingresó a "la casa más famosa del país".
