Las lluvias de los últimos días cambiaron los pronósticos de producción de trigo, elevándolos a 20,5 millones de toneladas (Mt). Esta proyección surge de tener en cuenta 6,9 millones de hectáreas sembradas y 200 mil que no llegarían a ser cosechadas.
“Hace un mes, el horizonte productivo de trigo había bajado a 20,1 Mt por la falta de agua. Agosto cerraba sin agua y con 650.000 hectáreas regulares a malas. Pero las recientes lluvias cambian de dirección a la campaña”, señalaron desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
Las tormentas que comenzaron el primer día de setiembre setiembre terminaron con tres meses de falta de agua en la región pampeana. Numerosas localidades del centro bonaerense han superado los 90 mm acumulados durante estos días.
La superficie sembrada con trigo y cebada fue récord.
El 60% de Buenos Aires, así como el 57% de la Pampa y el 90% de Entre Ríos, recibieron entre 45 y 70 mm. En Santa Fe, ese nivel de precipitaciones solo lo recibióeronel centro sur y una franja del este. La provincia en promedio alcanzó 30 mm.
En Córdoba, las zonas sur de la provincia y norte del departamento Marcos Juárez recibieron entre 45 y 60 mm. Las tormentas dejaron en el 63% del territorio cordobés lluvias mayores a 15 mm.
La zona productora de San Luis también cambió su escenario con más de 45 mm. Además, hubo lluvias muy importantes en Misiones y Corrientes, algunas zonas superaron los 100 mm.
El noroeste Argentino quedó fuera de alcance de las precipitaciones. Las zonas productivas del este de Chaco y oeste de Santiago del Estero apenas recibieron un puñado de milímetros.
Cambio de escenario
Un año atrás, en setiembre del 2020, la falta de agua generaba una proyección de producción bajaba a 18 Mt “y hacia eso se dirigía el trigo 2021/22 por la falta de agua de los últimos 3 meses. Pero cambió todo: las lluvias llegaron a tiempo para gran parte del trigo de la región pampeana que retomará su crecimiento, casi sin sacrificar potencial de rinde en las principales provincias productoras”, considera el infomre de la BCR.
Hasta la semana pasada, en Buenos Aires se estimaban 150.000 ha regulares a malas, 180.000 en Córdoba y 100.000 en Santa Fe. Las lluvias llegaron a tiempo para revertir los efectos de la falta de agua y de las bajas temperaturas de fines de julio y principios de agosto.
LM
